Cuando Avery regresó a casa, ya era de noche.

El clima no era muy bueno ese día, y ya había oscurecido.

La señora Cooper se sorprendió al verla empapada y aturdida.

"¿Qué pasó, Avery?". La señora Cooper tomó la mano de Avery. "¿No querías que el Amo Elliot se fuera? No te pongas así. Puedes volver a Aryadelle cuando quieras, ¿verdad?".

Avery negó con la cabeza y luego dijo con la voz ronca: "¿Dónde están los niños?".

"Robert está durmiendo. Layla y Hayden se están duchando. Estaban haciendo un muñeco de nieve en el patio delantero y se empaparon", dijo la señora Cooper. "Estás empapada, Avery. Ve a darte un baño caliente. ¿Necesitas mi ayuda?".

Avery negó con la cabeza, se dio la vuelta y se dirigió al dormitorio.

La señora Cooper la siguió preocupada.

"Por cierto, no vuelvas a mencionar a Elliot Foster delante de los niños". Avery se detuvo en seco, luego se volteó hacia la señora Cooper y continuó: "Terminamos. Usted y la señora Scarlet trabajan para él...".

No se atrevió a