El ganador se decidirá por quién cede primero.

"Layla, no conoces bien mi estado". Eric podía entender cómo se sentía, pero no podía permitir que perdiera el tiempo con él. "Puedo morir en cualquier momento".

"No te estoy obligando a que te cases conmigo ahora mismo", espetó ella. "Tómate medio año de descanso y, si todo sale bien, podrás sentirte mucho mejor. Si para entonces estás bien, haré que mis padres organicen nuestra boda. No me importa cuándo mueras. Mientras estés vivo para la boda, me casaré contigo".

Eric bajó la cabeza y no discutió, porque no podía hacer nada para que Layla cambiara de opinión a menos que él se muriera en ese mismo momento.

"¿De verdad te horroriza tanto la idea de casarte conmigo?". Ella se sentó sobre la cama y lo miró fijamente. "Si te estás muriendo, ¿por qué no quieres disfrutar del tiempo que te queda? ¿Por qué no quieres hacerme feliz? ¿Quieres verme triste?".

Él levantó la vista, sorprendido. Molestar a Layla nunca había sido su intención.