Ivy negó con la cabeza con una sonrisa. "Puedo manejarlo. Si ignoro sus mensajes, en algún momento desaparecerá. No tenemos por qué molestar a mi papá por esas cosas".

"¡Eres demasiado buena para ese niñato! No quiero que te acose. Si vuelve a seguirte, no te contengas y dile que se largue. Si se niega a escuchar, dímelo enseguida". A Brian le preocupaba que Ivy fuera demasiado amable como para rechazar a otros. Después de todo, fue lo suficientemente tolerante como para permitir que el chico la siguiera hasta las puertas de la universidad.

"De acuerdo. ¿Cómo está Layla?".

"Estaba en su habitación cuando me fui. No se pelearon, así que no te preocupes".

"Sí, Robert me lo contó, pero creo que Layla debe estar bastante disgustada".

"Habla con ella cuando llegues a casa, entonces. Es solo un hombre. Sin importar quién sea, no merece la pena empezar una discusión con su familia por él".

Ivy sabía que lo que decía Brian tenía sentido, pero los humanos no eran máquinas, y los sacrifici