Su familia y amigos rara vez le enviaban mensajes a horas tempranas a menos que se tratara de un asunto urgente. Sin embargo, no parecía ser el caso.

Abrió los mensajes y vio deseos tras deseos.

[¡Felicidades, Elliot!].

[¡Señor Foster, felicidades por la boda! ¡Felicidades!].

[¡Elliot, felicidades en tu gran día!].

...

Elliot se sonrojó ante todos los mensajes que recibió y pensó que debía de estar soñando.

Ya se había casado con Avery antes y, aunque se habían divorciado, habían celebrado la ceremonia alguna vez.

Como pensaba que estaba soñando, dejó el teléfono y volvió a dormirse.

Avery no se dio cuenta en absoluto del movimiento de Elliot, porque su teléfono empezó a sonar y fue al baño a contestar la llamada de Tammy.

Eran solo las seis de la mañana, así que Avery pensó que quizá Tammy estaba teniendo problemas para entrar.

Respondió a la llamada y Tammy le dijo inmediatamente: "Avery, es hora de despertarse. ¿Se van a despertar solos o tengo que entrar yo?".

Confundid