Avery apenas le dio importancia. Aunque todavía podía distinguir las figuras a grandes rasgos, buscó inmediatamente su teléfono.

Encontró su teléfono bajo la almohada y lo encendió. La pantalla estaba delante de ella, ¡pero las imágenes y las palabras estaban borrosas!

Buscó a tientas entre sus contactos, pero eran muchos. ¡No pudo encontrar el contacto de Elliot!

El miedo a la impotencia la abrumó. Las lágrimas comenzaron a correr por su cara. ¿Se estaba quedando ciega?

¿Su enfermedad anterior no se había recuperado, sino que había empeorado?

Ella lloró un rato antes de estirar la mano para secarse las lágrimas. Cuando volvió a abrir los ojos, su vista era ligeramente más clara que antes. Acercó el teléfono a ella. Podía ver un poco más las palabras en la pantalla.

Aprovechó la oportunidad para buscar el número de Elliot y lo llamó.

…

Al mismo tiempo, Elliot y Ben llegaron al aeropuerto. Estaban a punto de volar a Ylore.

Cuando sonó su teléfono, Elliot vio el contacto de Aver