SIETE DÍAS PARA LA LUNA DE SANGRECANIDAEDespués de la reunión con sus hijos, Gabriel insistió en que fueran a descansar. Personalmente se ocupó de vigilar a los médicos hasta que terminaron su atención médica a la reina y se retiraron a descansar a las habitaciones asignadas cercanas a los aposentos reales. Nahiara dormía plácidamente aunque con el ceño un poco fruncido por el dolor de las heridas, la plata hizo muy bien su trabajo y la pureza del arma era un verdadero peligro para cualquier lobo. Sabía que tendría que deshacerse de la misma en cuanto la tuviera al alcance. Suspiró, tenía mucho trabajo que hacer.En cuanto Nahiara estuvo dormida, caminó hasta la cabecera de la cama, donde descansaban muchos libros que ella leía y regalos que consideraba sumamente importantes. Sonrió nuevamente al pensar en su esposa mientras movía una de las estatuillas de arcilla creadas por los gemelos en preescolar y presionaba el botón escondido debajo.La madera crujió levemente y la puerta del
SIETE DÍAS PARA LA LUNA DE SANGREFRONTERA NORTE DE CANIDAE Solomon acató las órdenes de Kaia.Se detuvieron a descansar en el poblado justo al centro de un páramo verde, lleno de hortalizas y sembradíos. Los subordinados buscaron alojamiento para ellos y para su líder que aún no regresaba. Él tuvo que recordarles que Kaia no los abandonaría ahí y que era mejor ser productivos en su paso por el lugar. Y eso ocurrió.Los subordinados se ofrecieron a mejorar la calidad de vida de los habitantes compartiendoles conocimientos más actuales sobre el cuidado de las hortalizas, incluso algunos consejos de medicina de otros reinos atraía a los habitantes estudiosos. No pudo evitar recordar el primer encuentro y los años siguientes en los que Kaia se volvió su maestra y líder.________________________Las risas y cantos brotaban de cada ventana de la taberna en la que vivía, su vida diaria se basaba en levantarse antes del amanecer e irse a dormir mucho después de ponerse el sol. Las tareas d
SIETE DÍAS PARA LA LUNA DE SANGREUPYRDurante el almuerzo, el príncipe Seth ni siquiera tocó sus alimentos, solamente tomaba sorbos de la taza de té frente al plato de comida ya fría, mientras leía los informes de la guardia. Todos coincidían en lo mismo: Se había encontrado un rastro del ladrón a las afueras de la frontera del reino en dirección al bosque de Terra, sin embargo era obvio que el siguiente objetivo sería la lágrima de Gaia, después de que su padre lo dejase a cargo de todo, envió una nota de emergencia a Canidae. Odiaba tener que dirigirse a los perros falderos, pero era una situación de extinción.La nota solamente contenía la información sobre el ataque y lo más importante: La rosa de sangre había sido robada de las manos de Lady Catherine.Le sorprendió tener respuesta en menos tiempo del que esperaba, Gabriel Blaidd también le contaba sobre el ataque y la pelea entre la reina y el ladrón, reconocía la fuerza del enemigo y además daba detalles de la ubicación que o
ATARDECER DEL DIA SIETE ANTES DE LA LUNA DE SANGRE FRONTERA DE CANIDAE Y LOS BOSQUES DE TERRALain y Reygan se encontraban analizando los datos que tenían disponibles de la aldea, la recorrieron varias veces alrededor para conocer los puntos de escape y tratar de cubrir la mayor parte de los caminos con troncos y piedras que impidieran usar caballos o carruajes.-Parece que ya terminamos de cubrir las vias de escape en transporte… ahora nos queda esperar al chupasangre y podremos prepararnos para atacar- Lain se estiró, llevaban gran parte de la tarde colocando los troncos y desviando a los pocos viajeros que querían llegar a la villa. Se le conocía a ese poblado por sus abundantes plantíos de hierbas medicinales y sus habitantes eran desertores provenientes de varios reinos, de alguna forma lograron pasar sus diferencias y crear una comunidad neutral con la que nadie intervenía, pero también por la que nadie realmente se preocupaba. Si atacaban y la pelea se enardecía, nadie lamenta
NOCHE DEL DIA SIETE ANTES DE LA LUNA DE SANGREFRONTERA DE CANIDAE Y LOS BOSQUES DE TERRALas sombras se reunieron frente a la choza de Kiara, con Solomon encabezándolos.-Hermanos, estamos listos para partir… espero que honraran las enseñanzas de nuestra líder y dejaran a las personas con una mejor calidad de vida de la que poseían antes de nosotros…- Él hizo una pausa al escuchar las afirmaciones de las sombras. -Bien… tenemos cuatro días para llegar a nuestro destino, y entonces ayudaremos a crear un mundo mejor… prepárense para partir- Y dicho esto, las sombras permanecieron en alerta a las órdenes de su líder. Solomon entro a la choza para verificar que Kiara estuviera lista, y la encontró meditando sobre la cama. - ¿Alguna vez duermes? --Sólo cuando es necesario… ¿Todos están listos? --Únicamente te esperan… cuatro días de viaje parece mucho para ellos--Podrán quedarse en algún poblado en el camino si lo desean… en este punto ya tenemos lo que necesitamos para el ritual, y la
AMANECER DEL DIA SEIS ANTES DE LA LUNA DE SANGRE FRONTERA DE CANIDAE Y LOS BOSQUES DE TERRA - ¡Reygan! - El estoque le atravesó por completo el hombro, el ardor de la plata contra su piel era insoportable. Kiara aprovechó aquella distracción para dar otro golpe, usó toda su fuerza y con el segundo estoque atravesó al joven lobo en el pecho sin llegar a golpear su corazón, para después levantarse y tomarlo del cuello para que su linda hermana lo mirara desangrarse. -¡Deja a mi hermano!- Lain deseaba abalanzarse sobre ella y arrancarle el cuello con sus colmillos. -Alto ahí pequeña… a menos que yo retire estas espadas, tu hermanito morirá… así que hagamos un trato, devuélveme a mi asistente y yo te daré a tu gemelo…- Apretó su agarre, haciendo que Reygan se quejara. -No… no le… hagas caso…- Aun sin tener la posibilidad de curarse, estaba dispuesto a seguir peleando. Se sintió impresionada. -Ve por mi asistente- Kiara enterró un poco más el estoque del pecho, provocando la salida d
ATARDECER DEL DIA SEIS ANTES DE LA LUNA DE SANGRE UBICACIÓN DESCONOCIDA Solomon despertó cuando Kiara colocó en su frente un paño fresco, escucho el crepitar de una fogata y percibió el olor de un platillo con carne, su estomago rugió en respuesta. Se levantó poco a poco hasta sentarse y encontrarse de frente con su mentora. - Kiara... ¿Qué ocurrió? ¿Y los príncipes? – Las heridas de la pelea no eran profundas, pero ardían al moverse. - Intercambie tu vida por la del príncipe lobo, por eso escapamos – Ella sirvió un tazón que hervía en la olla sobre la fogata y lo colocó a su lado. - Come, hemos estado detenidos aquí durante medio día, debes recuperar fuerza – Solomon sostuvo el tazón con ambas manos y sorbió el contenido, algunas verduras y carne se asomaban entre el caldo, no tenía idea de que ella cocinara. Pero prefirió no decir nada. - ¿Dónde estamos? - Terminó el contenido del tazón y evaluó sus heridas. - En la frontera del Reino de las Hadas… y cerca de nuestro destino –
AMANECER DEL DÍA CINCO ANTES DE LA LUNA DE SANGREPRIMER TEMPLO DE GAIASolomon despertó con el sonido de un canto nada familiar, reconoció inmediatamente la voz de Kiara, así que siguió el sonido hasta el templo destruido y se maravilló al ver el oscuro cabello suelto de ella, y vestida con un traje completamente blanco, moldeando su voz, elevando las tonalidades y manifestando el dolor de la pérdida. Reconoció el canto, era una plegaria a la madre tierra para proteger el sustento y la forma de vida de la gente. Se sentó en una de las pocas bancas de mármol que seguían en pie, y esperó a que ella terminara con su ritual.Ella percibió a Solomon desde el momento que se levantó del campamento, pero no deseaba interrumpir la última oportunidad que tendría para hacer esas oraciones. Su hogar había sido destruido muchos años antes, y nunca tuvo el honor de realizar esas peticiones en vida. Eso no importa ahora, porque voy a tomar la venganza que me prometieron… Cuando terminó las oracio