Reía sosteniendome de sus manos para no caerme,él solo me miraba con una radiante sonrisa.

Nunca me había sentido tan feliz,sentía que todo a nuestro alrededor era perfectamente perfecto.

Hasta que Harry llegó a confundir mi mente y corazón.

* * *

—Treinta minutos y vuelves—habló mi mánager serio,asiento con la cabeza antes de salir corriendo.

No sabía que tan mal estaba todo lo que hacía,pero aún así mi desespero por sentir el calor de sus brazos era más grande que mi razón,me gritaba que no lo hiciera,que me mantuviera alejada de él,que no era nada ético y era una completa aberración.

Paré en seco frente a la puerta.

Cerré los ojos con fuerza y tratando de regular mi respiración vuelvo a abrir mis ojos para golpear la madera,mis manos temblando al igual que mi corazón,estaba mal pero se sentía bien.

—¿Qué sucede?—pregunta su ronca voz al verme.

No hago más que abrazarlo para dejarme caer en total locura,el llanto se hizo presente y Matt tomó mi rostro en sus manos confundido.

—¿Es