"Claro, entonces invitemos a Luna esta noche". La abuela Lynch ni siquiera lo pensó antes de aceptar la sugerencia de Fiona.

Por un lado, ella estaba realmente desconsolada por Nigel y Nellie. Ellos habían estado viviendo con Luna todo ese tiempo antes de que ellos fueran llevados bruscamente a esa casa para cuidar de Fiona, la mujer enferma.

Por otro lado, la abuela Lynch también quería que Fiona viera por sí misma, cuando Luna llegara, lo que se suponía era una mujer digna de ayudar a Joshua a cuidar de sus hijos.

"Pero...". En ese momento, Nigel, quien había estado en silencio todo ese tiempo, levantó la mirada y miró a Fiona.

"Tía Fiona, aunque extrañamos a mami, yo no creo que ella quisiera venir aquí para verte estar con papi".

Nellie, a su lado, también frunció los labios y asintió.

"Si de verdad crees que estar separados de nuestra mami es terrible, ¿por qué no eres caritativa? Intenta hablar con papi. Convéncelo de que nos lleve de vuelta a vivir con mami".

Fiona frunc