El cuerpo de Alice se puso rígido al instante.

Ella se mordió los labios, se dio la vuelta y se sentó junto a Joshua. Ella lo tomó del brazo. “Joshua, ¿de qué estás hablando? No entiendo".

"¿No entiendes?". Joshua sonrió. Sacó directamente un teléfono de apariencia antigua de su bolsillo y lo lanzó frente a Alice.

"Ahora, ¿entiendes?".

Alice frunció los labios. Se volteó para echarle un vistazo, su rostro se puso pálido.

El teléfono...

Era el mismo que ella había arrojado al lago.

Sin embargo…

Joshua la vio arrojando el teléfono al lago ese día. Le preocupaba que Joshua pensara demasiado y buscó el teléfono. Esa noche, ella consiguió a unas personas para que lo buscaran.

Recordó claramente que ella ya había conseguido que sus hombres buscarán el teléfono. Más tarde, derritió el teléfono con ácido antes de tirarlo a la basura de afuera.

¿Cómo eso pudo…?

La mente de Alice dio vueltas locamente rápido. Ella se rio.

“Joshua, este teléfono es exactamente el mismo que tiré el otr