"No... claro que no”. Alice se mordió el labio y miró a Joshua con una expresión lastimera. “No estaba molesta contigo. Al contrario, estoy encantada de poder trabajar en el Grupo Lynch. Sé que la razón por la que querías que viniera a trabajar es que no querías que me aburriera en casa, y también porque querías que me acostumbrara a este lugar para que podamos trabajar juntos en el futuro, pero…”.

Joshua entrecerró los ojos. "¿Pero qué?".

Alice suspiró y miró a Joshua. “Tenía miedo de que si comenzaba desde abajo, el resto de los empleados me despreciarían. Aunque soy la esposa del Director Ejecutivo, aún tengo que empezar desde abajo para avanzar…”. Alice se limpió las lágrimas y continuó: “Joshua, sabes que nací en una familia normal en la Ciudad del Mar. Mi familia no es rica, y siempre me he sentido insegura por eso…”.

Joshua frunció el ceño al escuchar eso. Él miró sus ojos enrojecidos y exhaló un suspiro profundo. "Tienes razón. Trabajar con alguien tan calificada como Luna p