Celia se congeló, incapaz de entender por qué Jacqueline se había vuelto contra ella de repente, e inmediatamente le devolvió otra fría mirada. "¿Qué hice, entonces? Dime, mocosa, ¿qué hice para merecer que Adrian enviara a sus hombres a golpearme como a una criminal?".

Al oír esto, Jacqueline no pudo evitar esbozar una sonrisa de satisfacción. Sacó su teléfono, puso una grabación y pulsó el play.

"Mocosa, ya te lo dije: Adrian y yo llevamos juntos más de dos décadas y si no me das suficiente dinero, seguiré acosándolos a los dos el resto de sus vidas. ¡Perra, yo le di un hijo a Adrian, y aunque Michael está en la cárcel ahora, tú probablemente no sabes que él está ahí porque asumió la culpa por su padre!".

"¿En serio crees que Michael podría haber llevado a cabo el asesinato de la abuela Lynch por su cuenta? Bueno, déjame decirte esto: si no me das dos millones de dólares ahora, no dejaré pasar esto. No sólo seguiré acosando a Adrian y saboteando tu boda, sino que sacaré a la luz t