La actitud de la Abuela Quinn había confirmado indirectamente las sospechas de Jim, quien entrecerró los ojos. "Lo único que quiero es ver su cama, Abuela Quinn. ¿Por qué estás siendo tan hostil?".

Él se rio entre dientes y se acercó a la Abuela Quinn. Su voz se volvió más severa cuando añadió: "¿Qué estás escondiendo debajo de tu cama?".

La expresión de la Abuela Quinn se oscureció al escuchar esto. Ella dejó escapar una tos ligera y sonrió torpemente. "Perdóname, puede que haya reaccionado exageradamente hace un momento".

Ella continuó tosiendo en su puño, fingiendo fragilidad, y dijo: "Sólo estaba sorprendida, eso es todo... ¡Esta es la primera vez que usted y su pequeña novia vienen a mi habitación, sin embargo, están exigiendo ver mi cama!".

"Para serte honesta, soy una anciana ahora, y es común que me sorprenda un poco esta petición".

"Después de todo, ¿qué hay para mirar en la cama sucia y desordenada de una anciana débil?".

Luego, ella le lanzó una mirada algo suplicante