"Pero por el aspecto que tienes ahora...". Luna no pudo evitar fruncir el ceño al mirar el dedo completamente vendado de Bonnie. "Creo que será mejor que te quedes descansando en casa".

Bonnie aún no se había recuperado de su lesión en el abdomen, e incluso había sufrido una fractura en el dedo.

A juzgar por la gravedad de sus heridas, Bonnie debería quedarse en casa y descansar.

Sin embargo, Bonnie negó con la cabeza. "Estoy bien. La Doctora Laura me dio un medicamento antes de irse, así que ya me siento mucho mejor".

Dicho eso, ella señaló el goteo intravenoso vacío que estaba junto a ella y le ofreció la mano a Luna. "Ya que este bebé le pertenece a Jim, quiero darle una última oportunidad, por el bien del bebé".

Ella miró a Luna mientras se quitaba la cánula de la mano y sonrió débilmente. "Quizás puedo darle un hogar apropiado al bebé".

Luna frunció el ceño. "Pero...".

Bonnie había dicho que la actitud de Jim hacia ella fue mala desde su encuentro en el hospital aquella mañ