¡El Grupo Landry no podía permitirse pagar quinientos millones de dólares!

Además, incluso si ellos pudieran pagarles, Jim no estaría dispuesto a entregarle ese dinero a los Martin por algo como esto.

Al ver la expresión de dolor en el rostro de Jim, el Señor Martin hizo una mueca y se apoyó en el respaldo de su silla. "No pararemos hasta conseguir los quinientos millones de dólares".

Antes de que los llevaran a la torre, el personal de la empresa de relaciones públicas ya les había dicho que el Grupo Landry era capaz de pagarles quinientos millones de dólares de indemnización y que el problema era si ellos estaban dispuestos a hacerlo o no.

¡La reputación de la familia Landry, una de las más influyentes de Ciudad Mercantil, valía mucho más que quinientos millones de dólares!

Jim no pudo evitar reírse cuando escuchó esto. "¡Me temo que incluso si logran obtener esos quinientos millones de dólares, no vivirán lo suficiente para gastarlos!".

"Secretario, eche a estas dos personas d