"A diferencia de algunas personas... Incluso después de saber que estoy en el hospital, ¡ninguno de ellos vino para verme!".

Luna fue testigo de todo lo que sucedió, y aun así, aparte de pedirle a Heather que lo enviara al hospital, ella no vino a verlo en absoluto.

Jim era aún peor. Él sólo aparecía si le gustaba, e incluso si el ángel estuviera aquí para llevárselo, ¡Jim ni siquiera aparecería para decir un último adiós!

Tan pronto como él pensó en sus dos hijos, Charles no pudo evitar encariñarse más con las personas que estaban frente a él. Él agarró las manos de Heather y de Malcolm y les dijo: "¡Ustedes son unas buenas personas! No se preocupen. ¡Incluso si tengo que usar mi último aliento, asistiré a su boda dentro de tres días y seré testigo de su amor!".

Charles sonaba sincero al decir esto.

Malcolm murmuró con aprobación, pero una pizca de impaciencia brilló en sus ojos.

Después de un momento, Heather finalmente terminó de darle de comer a Charles.

Charles se estaba en