Harvey se paralizó y luego agitó rápidamente sus manos en señal de rechazo. "¡No, no! Sólo vi lo bonita que eras... y no pude evitarlo".

Él señaló su sudadera con capucha roja y la gabardina roja de Bonnie mientras decía esto. "Mira, hermosa dama, incluso tenemos el mismo color favorito. ¡Este debe ser el destino!".

Bonnie miró al niño con una mirada de impotencia y le dijo: "¿Qué sabes tú de los colores? Hay diferentes tonos de rojos. El hecho de que dos cosas sean rojas no significa que sean iguales, tu…".

Sin embargo, antes de que ella pudiera terminar su oración…

¡Ella se dio cuenta de que el tono rojo de la sudadera con capucha del niño era idéntico al de su gabardina!

A ella le encantaba ese tono de rojo y había pedido especialmente que le hicieran ese color en diferentes estilos de ropa.

¡Ella nunca había esperado ver exactamente el mismo color en un niño!

A pesar de estar sorprendida, Bonnie no pudo evitar fruncir los labios con desaprobación. "Esto sólo es una coinciden