La Abuela Quinn miró a Luna y a Malcolm. Luego, ella miró al estanque y continuó alimentando a los peces que había en el. “Se está haciendo tarde y la cena está casi lista. ¿A dónde van?".

Malcolm sonrió. "Luna acaba de volver a Ciudad Mercantil, y aún no esta acostumbrada. Voy a sacarla a pasear".

"¿Sacarla a pasear?".

La Abuela Quinn hizo una mueca, luego se dio la vuelta y miró a Malcolm con severidad. "¿Temes que los ciudadanos de Ciudad Mercantil no sepan que el Joven Amo de la familia Quinn se ha convertido en un discapacitado? Esta mujer acaba de llegar, ¡y ya quieres sacarla y humillar a la familia! ¡Entren ahora mismo!”.

Dicho eso, la Abuela Quinn le ordenó a los guardias que estaban de pie a un lado, "Traigan a estos dos de vuelta a la casa. ¡En el futuro, no podrán salir de la Mansión Quinn sin mi permiso!".

"Abuela", Malcolm habló de inmediato. ‘‘Si quieres que Luna se quede y se case conmigo, no puedes tratarla como una prisionera y encerrarla en este patio. Yo no so