Capítulo 43

Despertar con los pequeños rayos de Sol que te proporciona el invierno en una ciudad nueva donde nadie te conoce es algo reconfortante, miro al chico que está a mi lado y sonrió como estupida, este chico en este  último tiempo ha cambiado un poco mi vida. Me levanto y voy al baño. 

En los tonos de colores siempre existirá el negro, mi negro es la discusión de anoche con Ses sacudo mi cabeza para quitar el recuerdo. 

—Todo estára bien Amonett.—me dijo a mi misma.

Me doy una ducha cuando salgo un abrazo me recibe.

—Buenos días.—un beso en mi f

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