Sabrina estaba sin palabras. Para su sorpresa, no fue por Ryan. Selene encontró a una ayudante. Después de tanto tiempo sin noticias de ella, finalmente hizo su movimiento, e incluso tiene un control mortal sobre Sabrina.Sabrina suspiró con dolor. Ella acababa de despachar a Emma, que vino con ánimo a mostrar su dominio, con su mirada. Apenas que Emma se fue, todos comenzaron a hablar en la oficina.¡Sabrina! La Señorita Emma es una dama con una posición muy alta e importante en toda Ciudad Kidon. ¡Quiero ver cómo vas a luchar contra ella!". Linda insultó a Sabrina sin siquiera intentar ocultar sus intenciones."Estuviste detrás de Linda durante estos días. ¡Finalmente recibiste tu karma, digna de alguien malvado como tú!"."¡Sabrina! ¿Crees que tienes un rey en tu casa? Incluso te atreves a ofender a la Señorita Emma, tch tch tch… Ver tu mirada obediente y asustada ahora realmente me levantó el ánimo, ¡jajaja!”.En este momento, ni el director de diseño podía ayudar a Sabrin
Yvonne sabía que su primo, Kingston, era el guardaespaldas personal de Sebastian. Él podría mantenerla con vida si llegara a suceder algo.Yvonne miró a Sabrina con una expresión seria. Sabrina, eres amiga de mi primo, ve a buscarlo. Él es el asistente de Sebastian y tal vez pueda ayudarte".Sabrina sacudió la cabeza. "Nadie podría ayudarme en este asunto"."¿No es solo por Ryan? No fuiste tú quien se interesó por él. Además, ni siquiera has comido con él hasta ahora, tampoco has hablado mucho con él".Sabrina sacudió la cabeza. "No es por eso, no lo entiendes. Estaré bien, no hablemos más de esto. No tienes que preocuparte por mí. Además, Yvonne, ayúdame a mantener esto en secreto. No le cuentes a tu primo, Kingston, sobre este asunto, ¿de acuerdo?”.Yvonne no entendió. "¿Por qué no puedo contárselo?".Sabrina sacudió la cabeza. "Tu primo es solo un chofer. No puede ayudarme y eso le causará problemas. No quiero que este asunto se complique. ¿Lo entiendes?".Yvonne asintió. "Mm
Sabrina nunca había visto a la mujer que le habló. La mujer se veía bastante guapa y se vestía aún más elegante y exótica que la madre de Susan.Un Bentley que costaba casi tres millones de dólares estaba estacionado cerca. Sabrina se dio cuenta inmediatamente que esta mujer era la esposa de un hombre rico.Sabrina notó el tono severo con el que le habló la mujer adinerada. Sin embargo, debido al incidente de la mañana donde Emma había llegado buscando problemas, Sabrina no quería tener nuevos problemas y complicar las cosas.Inmediatamente le preguntó con humildad a la mujer: "¿Puedo saber cuál es su hijo? Estuve muy ocupada estos últimos dos días y olvidé responder los chats grupales. Sin embargo, asistiré a la fiesta que está organizando nuestro grupo. ¿Puedo saber en qué hotel o casa será? Independientemente de donde sea, pagaré lo necesario y responderé de manera proactiva a los mensajes del grupo".Después de escuchar lo que dijo Sabrina, la mujer adinerada se burló: “Hablas
"Mamá, yo sí sé. Ella es la madre de mi compañera de clase, Mia Collen”, respondió Aino apresuradamente."Oh...". Ella era la administradora del grupo. Sabrina finalmente la conoció hoy.Sebastian miró con irritación a Sabrina. "¡Hasta Aino conoce a más personas que tú!".Sabrina se quedó sin palabras. Ella no respondió, solo miró por la ventana.Sebastian la miró. ‘¿Qué le pasa hoy?’.Siempre había sido callada, pero hoy actuaba fuera de lo normal. Era como si su alma hubiera abandonado su cuerpo. En los últimos dos días, ella era dócil como un pequeño ciervo. A menudo lo buscaba, se escondía entre sus sábanas y también apoyaba su rostro en su cuello. Felizmente descansaba en su hombro.¿Qué pasó hoy?, Sebastian miró a Sabrina, cuya mente estaba divagando, luego tocó con sus manos su frente. "¿Estás enferma?".Sabrina se estremeció levemente, luego le respondió con una reacción tardía. "No, no".Al tocarla se dio cuenta que no tenía fiebre. Tenía la frente fría y no estaba en
El corazón de Sabrina se hundió ante sus palabras, pero consiguió mantener la calma en el exterior. Evitó mirar directamente a Sebastian y en su lugar se giró para mirar fuera de la ventana. Su expresión era indiferente, casi como si estuviera atrapada en su propio mundo y nada fuera de él le interesara o afectara. Era probable que siguiera igual aunque hubiera un cuchillo contra su garganta. A Sebastian siempre le había gustado esa expresión en ella y también cómo se sentaba con la espalda erguida y elegante. Extendió un brazo para acariciarla suavemente por la espalda, Sabrina no se opuso y se inclinó hacia él como una gatita melosa. Él solo podría haberle recordado que no se preocupara por lo que le ocurría a Emma, pero ella había leído los mensajes de texto y entendía que su amistad con la familia Poole era simplemente demasiado valiosa para que una mujer que Sebastian llevara a casa cuestionara cualquier cosa relacionada con ellos.También estaba la posibilidad de que se hubie
La diferencia de poder en su relación era muy grande para que ella pudiera escapar de él. Podía cuidarla, enseñarle a conducir, obtener un certificado de matrimonio con ella o incluso llevarla de vuelta a la antigua residencia de los Ford para anunciar que ella le pertenecía, pero cuando se trataba de elegir entre su mejor amigo y ella, Sabrina sabía que era reemplazable. Permaneció en silencio incluso después de que llegaran a casa y dejo que Aino pasara tiempo con Sebastian después de la cena, como siempre lo hacían.Tomó su teléfono y volvió a su habitación, antes de abrir el chat de grupo privado de las madres del jardín de niños al que iba Aino y empezó a revisar todos los mensajes. No tuvo tiempo de revisarlos previamente y, ahora que lo había hecho, se dio cuenta de que había gente en el grupo que cuestionaba si valía la pena que ella fuese añadida a la sala de chat. Cuando no contestó, las pocas madres que eran más activas que las demás empezaron a chismear y a decir al
’¿Una llamada muy importante? ¿Debería subir a pedirle el dinero?’. Sabrina se lo pensó un momento antes de desistir y decidió esperarlo abajo. Sabrina pensó que debía tratarse de algo que él no quería que nadie supiera si iba hasta el último piso para atender la llamada. Tenía razón, Sebastian no quería que Sabrina se acercara a él cuando estaba en esa llamada. Diez años atrás, cuando Sebastian estaba exiliado en el extranjero. Emma, la segunda dama de la familia Poole, recién cumplida con dieciocho años, lo perseguía apasionadamente. Sin embargo, Sebastian estaba huyendo en ese momento y no tenía ningún interés en el romance. Además, no le gustaba la arrogancia y el egoísmo de las jóvenes adineradas como Emma, por lo que la había rechazado en múltiples ocasiones. Cuando eso no funcionó, Sebastian pasó a los insultos para librarse de la persistente persecución de Emma.No hace falta decir que Emma tenía el corazón roto y que siguió así durante uno o dos años después, cuando fin
Él respondió llevándola a la sala de estudio con el brazo alrededor de ella. Fue a buscar una tarjeta en un cajón antes de entregársela. "Hay cinco millones, la clave es tu cumpleaños". "Con cincuenta mil dólares es suficiente, no necesito tanto", murmuró Sabrina. "Esto era para ti como forma de compensación", le explicó. La tarjeta era la que pretendía regalar a Sabrina, pero fue rechazada por ella hace seis años, tras el fallecimiento de su madre Grace Summer. ¿Compensación? ¿Era por la manipulación y el insulto que estaba a punto de sufrir a manos de Emma? ¿Le estaba pagando cinco millones por adelantado por su sufrimiento? 'No está tan mal, supongo', pensó Sabrina. 'Mientras lo soporte, los cinco millones son más que suficientes para que por fin pueda volver a visitar la tumba de mi madre. Lo que queda puede ser usado para muchas cosas, al menos Aino podría guardarlo como un seguro para su futuro'. "De acuerdo". Tomó rápidamente la tarjeta y se dio la vuelta para marcharse.