Eva nunca esperó que Yvonne fuera tan poderosa.

“¡Maldita p*rra! ¿Qué calificaciones tienes para casarte con alguien de la familia Shaw? ¡Hoy, mi hermano ni siquiera vino, lo cual es suficiente para demostrarte que él ya no te quiere! ¡Cómo te atreves a tocarme! ¡Cómo te atreves a meterte conmigo!”. Eva se volvió agitada, levantando su pie como si fuera a patear a Yvonne. Ella fue contenida por varios guardias de seguridad.

Uno de los guardias de seguridad fue muy agudo. “¡Señorita Yerbury! ¡Esto es un espacio público, no un lugar para que pierdas el tiempo! Aunque no somos la policía, tenemos una obligación de asistir a mantener la paz. ¡Molestar la paz y causar problemas en un espacio público no es un pequeño crimen! ¡Creo que es mejor que te quedes en la estación de policía!”.

Fue imperativo que varios guardias de seguridad se unieran y presionaran a Eva contra el suelo.

Esta vez, Eva era realmente como un perro, tirada en el suelo, incapaz de moverse.

Yvonna se levantó y se