La expresión de Sebastian era muy tranquila. "¡Sabrina, tu madre ha sido demasiado miserable toda su vida!".

"Lo sé. ¡Sé mejor que tú que mi madre ha tenido una vida difícil!", dijo Sabrina.

"Nunca he hecho nada por ella. He estado ocupado con el Grupo Ford todos estos años. Marcus siempre ha sido quien la cuida. Como su yerno, se me considera medio hijo de ella. Además, eres su única hija. Deberíamos ser nosotros los que nos ocupamos de todo por ella. No hemos hecho nada por ella. ¿Entiendes, Sabrina?".

Sabrina estaba cubierta de lágrimas. ¿Cómo podría no estar conmovida? Ella estaba conmovida por lo que Sebastian había hecho por su madre. Sin embargo, sintió que era injusto. Después de todo, esos eran sus tres hijos. De repente saltó a los brazos de Sebastian y lloró desconsoladamente. "Sebastian, te amo. ¡Te amo!".

Sebastian abrazó a Sabrina, y luego miró a los tres hermanos Shaw con una mirada inquietantemente fría. "¡Los estoy perdonando a ustedes por el bien de tu tía, la