"¡Dios! No sé qué hacer contigo. ¡Eres como un niño!". La niña de siete años ya se sentía como una adulta.

"Ja, ja, ja. Aino es ahora como una adulta". Sean ya estaba adulando a Aino en ese momento.

Sean entonces se mudó al jardín de la azotea en el piso más alto. Se estaba quedando cerca de su hija y su nuera, y también podía encontrarse con su nieta y su nieto todos los días. Por lo tanto, su estado de ánimo también mejoró. De vez en cuando, visitaba la tumba de Summer y pasaba allí una tarde entera cada vez que iba. Él murmuraba para sí mismo: "Todos ustedes han fallecido. Sin embargo, todavía estoy vivo. Puedo ver a mi nieto y aún puedo quedarme con mi hijo y mis nietos. ¿Por qué me merezco esto? De repente siento que seguir vivo me está haciendo sufrir. A veces, siento que no siempre es bueno que alguien siga con vida. Soy capaz de seguir viviendo, pero tengo que ver cómo ustedes descansan aquí todos los días y noches. Estoy sufriendo, Grace, Holden. Yo… vendré a limpiar su tu