El tono de su esposa fue increíblemente agudo. “¡Noah Hill, te estás casando con mi familia! ¡Con mi familia! A partir de ese día, serás un miembro exclusivo de ella. ¿Por qué asistiría a mi boda una vieja campesina? Mis padres la están preparando, y si ella se presenta, ¡solo estaría humillando a mis padres!”.

Noah estaba furioso. “¡Si quieres casarte, mi madre tiene que ser invitada! De lo contrario, ¡prepárate para un divorcio!”.

Esa noche, su esposa lloró tanto que apenas podía seguir hablando. Mientras lloraba, incluso reprendió a Noah por ser un monstruo frío y sin corazón. “Mis padres han sido tan amables contigo, te han cedido toda la compañía. En cuanto a mí, soy una graduada universitaria, pero no te he menospreciado en absoluto por eso. Además, a mi hijo le agradas mucho. ¿Y tú? Nuestra ceremonia de boda aún no se ha celebrado, ¿y ya estás planeando controlar a mi familia?”.

Noah se enfureció. “¿Cuándo he planeado controlar a tu familia?”.

Su esposa le gritó: “¡¿Entonc