Los ojos de Zachary se llenaron de dolor y tristeza, pero no reaccionó tan violentamente como ayer.

—Seren, ¿de verdad quieres criar esos animalitos? Si quieres, le pediré a Felipe que te guíe, y tú y Jasmine podréis ir a ver los huertos de nuestra familia. Si crees que es un buen lugar para las gallinas, puedes alojarlas allí. Está bien si quieres cuidarlas tú mismo, o que lo hagan los labradores.—dijo suavemente.

Serenity frunció el ceño ante eso y dijo.—Cuando fui a tu villa durante las vacaciones de año nuevo, no vi ningún huerto en tu casa.

—Hay muchos árboles frutales plantados en unas colinas junto a la villa de Avena, ése es el huerto. Esa es la mansión principal de nuestra familia, y nos quedamos en aquel entonces en la mansión vieja.

A Serenity ya no le sorprendía que hubiera aparecido otra gran villa en la familia York.

Después de todo, eran la familia más rica.

Era lógico que estuviera metida en todas las industrias que tenían algún beneficio.

—¿Estás dispuesto a dejarme sa