Parecía que ese papel no estaba en su tocador ahora, ella dibujó en la parte posterior de la misma...

De repende, ella lo recordó.

Serenity miró fijamente a la dormido Zachary, lo que había destruido sin darse cuenta no era sólo su cuadro, sino también el acuerdo entre ellos. No, fue el acuerdo de Serenity, el de él debía estar bien conservado.

Serenity pinchó la cara de Zachary con el dedo, y él no respondió, Serenity la volvió a pinchar y dijo en voz baja: —Destruiste mi acuerdo, y tú aún tienes el tuyo. Eso es justo, ya no estoy cubierta.

Serenity pensaba: ¿Debo robar su acuerdo y destruirlo?

De ese modo, era justo, nadie tenía un acuerdo, nadie estaba obligado a nadie y ella podía estar más tranquila.

Al pensar que ella no tenía acceso a su habitación, a Serenity le dio dolor de cabeza, ¿qué podría hacer para robarle su acuerdo y destruirlo?

¿Emborracharlo?

¿Golpearlo?

¿O seducirlo?

Serenity pensó en varias formas, pero al final las descartó todas. Pensó que era mejor esperar otras