A menudo les resultaba difícil comer la comida que preparaba Zachary, solo Abuela May se atrevía a pedirle que cocinara.

Después de que Zachary se casó, todos podían disfrutar de la comida que él preparó gracias a Serenity.

Si todos estaban en Villa de la Avena, mientras Serenity quisiera comer algo, Zachary lo prepararía inmediatamente y haría todo lo posible para satisfacerla.

Zachary dijo que haría que todas las mujeres envidiaran a Serenity, y él cumplió su palabra.

Zachary entró en la cocina.

Arturo permaneció allí en silencio durante dos minutos antes de salir de la casa y dirigirse al patio trasero para buscar a Abuela May.

En realidad, ella estaba en el patio trasero, con un altavoz a su lado, haciendo aeróbicos.

Arturo se quedó sin palabras.

Odiaba mucho los aeróbicos.

Cuando era adulto, compró una casa en una residencia con el primer dinero que ganó, la cual estaba cerca de la empresa y era conveniente para desplazarse al trabajo.

Como resultado, las tías de la residencia hac