Lucas se negó fríamente: —No quiero beber contigo, lo siento.

Dicho esto, Lucas pasó junto a Giselle rodeada de guardaespaldas.

Giselle vio a Lucas pasar y lo llamó dos veces, pero Lucas la ignoró y ni siquiera se detuvo.

Giselle estaba tan enojada que golpeó con el pie.

Aunque la familia Fisher no era la más rica de Ciudad Río, era una de las familias más adineradas. En el pasado, mientras Giselle, la hija de la familia Fisher, asistiera a banquetes, mucha gente la complacería y la adularía.

También había muchos hombres que la admiraban, pero esos hombres eran incompetentes y ociosos.

Giselle era arrogante, entonces, ¿cómo podrían agradarle estos hombres? Sin embargo, dado que la regla familiar de la familia Fisher era que las mujeres eran líderes y relativamente fuertes, la mayoría de los hombres no querían meterse con las hijas de la familia Fisher.

Solo a los hombres sin habilidades reales les gustaría casar a la hija de la familia Fisher.

Giselle era como las admiradoras de Lucas.