Uno de los hombres esperó pacientemente mientras Jessica terminaba de vomitar, luego le entregó una máscara.

Jessica se colocó rápidamente la máscara, aunque aún podía percibir el olor. Se cubrió la boca y la nariz con las manos y siguió a los dos hombres hacia el interior del edificio.

Una vez adentro y apartada de las basuras, Jessica se atrevió a soltar las manos que cubrían su boca y observó a su alrededor. No había residentes cercanos. Nadie se habría dado cuenta si ella muriera aquí.

Estos pensamientos hicieron que Jessica temblara de nuevo.

No sabía quiénes eran estas personas. Fueron las hermanas Serenity quienes ofendieron a ellos, ¿por qué la buscaron?

Ahora ella y las hermanas Serenity eran enemigas también.

—Señorita Jessica, no tenga miedo. Les pedí que te trajeran aquí. Solo quiero discutir un trato contigo. Colaboramos para vengarnos de la señora York.

Una voz femenina desconocida resonó desde una habitación en el primer piso, aunque nadie era visible.

Jessica no se atre