Capítulo 1378
—Pero puedes venir conmigo, sólo que no podemos hablar de lo que haremos, ¿entiendes? —Ana le instruyó seriamente a José.

El pequeño asintió con la cabeza, como dando su consentimiento.

Entonces Ana se fue con él. Originalmente, ella se había movido de forma sigilosa y solitaria, pero ahora la situación cambió a escurrirse con un niño de la misma manera, saliendo a hurtadillas como si estuvieran cometiendo un delito y temiendo ser descubiertos.

Ana colocó a José en el asiento infantil trasero del coche y luego condujo hacia el hospital.

José miraba por la ventana el paisaje oscuro, ya era muy tarde, por lo que sólo se veían esporádicos destellos de luz de las farolas, todo envuelto en una tranquila oscuridad.

—Mami, ¿a dónde vamos? —preguntó José, incapaz de contener su curiosidad.

—Mmm, ya lo verás cuando lleguemos —respondió Ana de forma evasiva, sin dar más detalles.

El coche avanzó rápidamente, llegando en poco tiempo al hospital donde estaba Lucas.

Debido a la hora tardía, el hosp
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP