— No tengo por qué obedecer sus órdenes ya no trabajo en su Empresa y no pienso hacer esto que esta ordenándome, no lo voy a hacer.— Alicia tenía una mirada fulminante.— No te he preguntado si quieres o no, te lo estoy ordenando Alicia - Alessandro se acercó a ella de manera peligrosa y algo se removió en el interior de ella al observar la ferocidad con la que la estaba mirando el hombre.— Alessandro Morgan, eres un maldito infeliz acostumbrado a que todos sigan sus órdenes, pero te repito que no soy tu empleada, ya no, soy tu esposa.— Una esposa que se acuesta con tiros a pocos metros de mí ¿Así te consideras mi esposa? — No sabe cuánto lo detesto, señor Morgan - Alicia lo fulmino con la mirada.— El sentimiento es mutuo, señora Morgan - Responde Alessandro, en eso su teléfono celular suena y al darse cuenta de que es su detective privado se aparta de Alicia.- Señor, la Señora Morgan está en la misma casa el señor Marcelo la tiene en su poder ella después de que usted salió de s
Todo estaba encaminado a que Marcelo Morgan recibiría una Empresa prácticamente sin socios comerciales por supuesto Alicia había tomado la decisión de dejarle 6 aunque estos estaban en la carpeta oscura, sus tratos no eran los mejores y nada más estaban anexados en el caso de que algún día sea necesario o sean considerados a tener en cuenta, la rubia estuvo mirando los informes Alessandro en 3 años enriqueció 7 veces más la fortuna del hombre había ido en aumento, pero ahora venía a maquillar los números, ella sabe que no debe de hacer eso, pero ya era tarde con un solo Clip había realizado su objetivo en eso escucha que el teléfono vuelve a recibir una notificación rueda los ojos y lo revisa efectivamente era quién ella estaba pensando, así que una vez más decide ignorarlo.La noche había caído Londres estaba en pleno movimiento Alicia había cerrado el ordenador con un suspiro de por medio en eso suena el timbre, supuso que era Alessandro entonces la mejor opción era no abrir, pero h
Antes de que Alicia diera una respuesta el timbre había sonado, ella frunce en ceño y Alessandro maldijo por la bajo la intromisión.— No molestes y ve a la habitación - Expuso Alicia.— No pienso irme en ninguna habitación - ¿o no quieres que me vean en tu departamento? ¿Estás esperando a alguien? — Imbécil, haz lo que te plazca si quieres desnudarte y que te vea la persona que acaba de llegar también lo puedes hacer no me interesa - en eso el timbre vuelve a escucharse y la rubia se dirige hasta la puerta cuando la abrió Marlene tenía una botella de Whisky en sus manos.— Mi intuición me decía que estabas aquí vamos a tomar para que te olvides del imbécil de Lucas y que te olvides que estás casada con el CEO - Expuso Marlene sin imaginarse acerca de quién la estaba observando, cuando Marlene miró por detrás de Alicia palideció, la chica trago saliva ante la poderosa mirada de Alessandro Morgan, Alicia también parece escuchar los latidos de su propio corazón, ambas jóvenes saben que
— Te atreviste a ponerme una mano encima maldita infeliz - Liliana había reaccionado y estuvo dispuesta a devolverle el golpe que Alicia le había dado - Ahora vas a saber quién es Liliana Casanova - La rubia se veía como una fiera, mientras que Alicia no sentía intimidada en lo absoluto y se tomó el atrevimiento de volver a responder.— Sé perfectamente que eres una maldita perra - Allí Liliana se lanzó por encima de Alicia, pero el cuerpo de Alicia fue jalado hacia atrás Alessandro sostuvo de la muñeca a su esposa, mientras los guardaespaldas se interponen y detienen las intenciones de Liliana de la raíz.— El día que la toques a ella Liliana Casanova será el día en que tus manos se separan de tus brazos, te las corto - con aquellas palabras Alessandro y Alicia salieron del Bar mientras Liliana se había quedado aún más enojada algunos hombres empiezan a tirarle la honda y aquello parece gustarle, ahora disfrutará, pero mañana iniciará su plan de destrucción de la esposa de Alessandro
Las manos de Alessandro logran que el cuerpo de ella se sacuda ninguno de los dos baja la mirada, como si existiera una sola duda y era la de sobre pensar en escasos segundo si valdrá la pena dejar que las llamas de la pasión los consuma a ambos, que si aquellas cuatro paredes será testigo del naufragio de dos cuerpos en el placer, la voz del hombre y su carácter impone distancia, pero su mirada y su tacto anhelan desenfreno de pasión, aquellas miradas expresan lo que ellos no con capaces de expresar, quieren estar juntos, se desean, se anhelan, pero es tan complicado como ellos, esas palabras están allí, pero ocultos en algún rincón de sus pensamientos.— ¿Puedes soltarme? - pregunta Alicia mirando directamente los ojos del hombre, aquella mirada que podría convertir en cenizas a la pequeña mujer, Alicia permite deleitarse con sus ojos, parecen ser profundos y en lo más recóndito de sus pensamientos se imagina como sería aquella mirada fuera de amor, quizás en otra vida ella lo pueda
Alicia después de aquel placentero encuentro e intercambiar palabras con Alessandro se había quedado dormida, cuando volvió a abrir los ojos se había percatado de que estaba sola, había analizado la habitación, era la de Alessandro se sentó en la cama, todos los sucesos se amontonan en su mente, los besos, los gemidos, el recuerdo de las manos del hombre acariciando su cuerpo sigue siendo escalofriante, recordar que se entregó a Alessandro, se mordió los labios no estaba arrepentida, no iba a frustrarse por eso, ella lo quiso, ella lo deseaba y pudo saciar mínimamente la sed que tenía de él, pero no sabe si esto se volverá más intenso.La chica miró el reloj era las 4 de la madrugada, la chica se había puesto de pie, su cabellera rubia estaba enredado, su cuerpo dolía, su feminidad también tenía una pequeña molestia, pero con todo eso ella se dirigió a su habitación, se había dirigido al cuarto de baño, darse una ducha había relajado las articulaciones ella cerró los ojos permitiendo
— Lo lamento Marcelo, pero no estoy dentro del trato que tiene con mi marido.— Te llenas la boca diciendo mi marido y solo es un matrimonio de conveniencia o contrato, además intimidas con el vicepresidente.— Suficiente, no hay trato, ayer, debiste de dejar en claro tus condiciones - Alessandro intervino.— No te hace falta ninguna asistente - Liliana también se interpuso en la conversación.— Lo ves tu amada no ve con buenos ojos eso, además con ella no, no hay trato que funcione - Alessandro lo expuso con tanta claridad que Marcelo sabe que no hay manera de que su nieto acceda a su solicitud, el viejo deja ver una sonrisa peligrosa dejando en claro que tarde o temprano Alicia caerá en sus garras.— Podemos pasar a la Sala de Juntas - Informa Marlene.— ¿Por qué hay tan pocos empleados? - Pregunta Marcelo con desconfianza.— Les he dado el día Libre - Alessandro se acomodó en el centro a su derecha esta Alicia, Marcelo no deja de mirarla y aquello la molesta, pero sabe que solo ser
Alicia se apartó de Alessandro, el hombre vuelve a tomar asiento.— Lo haré mañana - Responde ella.— Tú serás mi asistente Alicia lo sabes ya, aquí está estipulado como nos repartiremos todo lo que producimos - Alessandro ya tenía su aura que destila frialdad en su totalidad - Además mañana a las 9 Tú iras a corroborar la primera obra que se firmara a las 7 de la mañana y tú lo vas a tomar. Alicia quedó pálida, aquello generaba temor en ella, sus ojos esmeraldas se posan firmemente en Alessandro Morgan.— Tienes montón de arquitectos que pueden hacer eso ¿por qué yo Alessandro? - Alicia había emitido un suspiro con fuerza.— Por qué así lo ordenó yo Alicia, debes de soltar el temor al pasado, es doloroso que tus padres hayan muerto mientras realizaban las revisiones correspondientes, pero ¿qué te dice a vos que aquello va a repetirse? Debes de soltar tus miedos y aceptar que ese era el momento de ellos tú también lo tendrás y déjame decirte que incluso estando en tu casa te va a lle