— El interior de la cabaña que se encontraba por debajo de la Laguna tenía un ambiente tenso, Emma sentía que su corazón se había saltado varios latidos al escanear con su mirada a Kamill que sostenía a 3 pequeños en sus brazos sin importar que los mismos manchen su prenda - Mariposa - La hermosa sonrisa de Kamill logró hacer vibrar el corazón y el cuerpo de Emma al escuchar ser llamada Mariposa por el elegante hombre que se estaba acercando a ella y entonces Emma no pudo contenerse dejando que unas lágrimas resbalen por su encantador rostro - Mariposa, quisiera guardar cada lágrima tuya en un cristal - Kamill le entregó uno de los retoños de Sangre mientras iba por el último.— Emma miró al bebé que cargó por primera vez y aunque no tuviera tantos recuerdos de lo ocurrido, la primera conexión que tuvo con el pequeño Vampiro de ojos grisáceos se sintió reconfortante para el corazón, ondas del color rojo daban vueltas en aquellos ojitos, mientras Kamill también se posiciona a su lado c
— La mirada de los 3 pequeños Vampiros no derrochan ternura más bien tenían la maldad en ellos, tenían la penetrante mirada del Rey que se encontraba acariciando el Oráculo que reposaba en su muñeca, tanto Kamill y su familia ya habían abandonado el misterioso y estratégico sitio en donde se encontraban esta vez habían llegado a una cabaña bastante apartada, pero se sentía la presencia de Lobos en los alrededores, no se trataba de cualquier Lobo se trataba de Pícaros, mientras que Emma seguía manteniéndose pálida la Vampiresa había dado por hecho de que necesitaba beber de sangre así que supuso que iría a cazar.— Vampiresa, la sangre está contaminada - Expresó Kamill - Debes esperar 3 días para beber de la sangre - La mirada Grisácea del Vampiro se posó en sus hijos posteriormente volvió a mirar a su esposa - puedes salir a relajarte mientras me ocupo con Adán de un asunto antes de mantener una charla con mis seguidores - Kamill se acercó a Emma depositando un casto beso en los labio
— Eran 3 pequeños Vampiros reposando en un Cristal ante la atenta mirada Grisácea de su padre - ¿Cómo están evolucionando? - Alicia había llegado por detrás de su hermano dirigiendo su atención a sus sobrinos.— La Sangre es indispensable para ellos, pero el virus se ha propagado de manera muy rápida, si llegan a consumir de la sangre envenenada morirán, por eso la sangre que consuman debemos de tenerla en sumo cuidado y aquello es imposible, no sabemos quiénes están contaminados y quienes no - Kamill se masajeó la frente - Además Emma lleva 48 horas sin reaccionar, ellos necesitan de su madre, solamente la sangre de ella puede solventarlos.— No entiendo cómo la sangre nuestra que es considerada la más poderosa por ser hijos del Ancestro, no puede ser consumida por ellos - Alicia había realizado un puchero— Por la dominancia de la Sangre Moretti - Kamill se había puesto de pie - Si la combinamos con la sangre Volkov será muy perturbador para ellos, son muy pequeños, no quiero que es
— El viento se sentía con fuerza en un momento dado y ella abrió sus ojos, no eran rojos, mucho menos oscuros, los ojos de la Reina de todos los Vampiros era amarillo - Prueben su suerte - Murmuró Emma Moretti claramente las palabras de los Científicos se habían reproducido en su mente, pero el quejido de un bebé hizo que su rostro se gire encontrándose con sus hijos, una dulce sonrisa se vislumbró en su rostro, la Vampiresa se había puesto de pie de manera rápida y allí los encontró los 3 tenían los ojos bien abiertos - Mis pequeños tesoros - Emma rápidamente entendió que estaban en su tiempo de ambientación - ¿Qué les ha hecho papá? - La Reina Vampiresa miraba con ternura a sus pequeños hijos y estos la miraban curiosamente, los 3 vestían pequeñas prendas rojas que los dejaba ver adorables, pero la mirada de la Vampiresa parecía tener algo más ocultó.— La mirada de Emma se posó en el bosque que los rodeaba, pero la molestia que sentía en su garganta hizo que cerrará los ojos la san
— ¡Te deseó! - Aquellas palabras tenían varios significados y Emma ya las conocía.— Recuerda que - Pero antes de que la Vampiresa expresé alguna palabra, los fríos labios del Vampiro se habían cernido por encima de los suyos, fríos labios cuyo contacto calentaba todo en ambos, la sangre de ambos fluye con más intensidad por el deseo que destilan, sus cuerpos reclaman por contacto, boca a boca bebiendo como el buen vino el sabor del otro, como la sangre que los moviliza disfrutando de aquella llama pasional como la muerte.— Entrégate a tu Rey, pequeña Mariposa - la voz de Kamill se sentía como un Valle desolado y escalofriante, Emma no dudo en envolver sus brazos por el cuello del vampiro, dejando que sus colmillos tiren de Kamill, el Vampiro la cargó por encima del escritorio, Emma traía puesto un vestido aquello había facilitado la labor de Kamill que no ocultaba él deseó de hundirse profundamente en el interior de Emma - No sabes cuánto anhelo sentir cada parte de ti, estoy urgido
— Mientras Kamill se acomodaba el saco, Emma se encontraba con unas cuantas hojas que tenían ilustres de Sangre, espadas y Arterias principales para atacar ante sus ojos - No voy a preguntarte si podrás, pero si te diré que si tienes que elegir entre los Vampiros o tu vida, para mí tu vida está por encima de todos, porque tú podrás dar la vida por ellos, pero ellos pueden dar la vida tuya y la de nuestros hijos por el de ellos - Kamill se había colocado unos lentes de contacto que dejaba verlo con unos ojos avellana, Kamill quería que sus hijos fueran alejados, pero no podían dejar la ambientación.— Ha llegado la hora de partir - Fue lo único que Emma dijo para levantarse y besar a Kamill, un beso fugaz y el Vampiro se alejó, el Clima se sentía muy fría, pero los Vampiros lo disfrutaban, el bosque que los rodeaba estaba envuelta en una tiniebla, el Vampiro se adentró en la habitación en dónde se encontraban sus hijos.— Pequeños Vampiros - Kamill se acercó a la ventana dibujando con
— Una tormenta de Nieve acompañada de vientos fuertes hizo que la cabellera de Emma vuele, la Vampiresa se había dado la vuelta al sentir la presencia del Ancestro, el quejido de los trillizos hizo que Emma cerrará los ojos, el Vampiro había llegado mucho antes de lo que ella se esperaba - Ve Emma yo me quedo con ellos - Maribel Betancourt se posicionó a espaldas de Emma - nadie les hará daño - Y aquella era la preocupación de la Vampiresa y era que Vladímir estaría muy cerca de los pequeños Vampiros - No vamos a permitir que se acerque tú tampoco lo vas a permitir.— Emma volvió a abrir los ojos la cercanía de Vladímir se percibía, no en vano era el Ancestro y los Vampiros lo reconocen como alguien a quienes ellos deben de respetar - Adán - la Vampiresa se acercó a sus hijos antes de empezar a dar órdenes - convierte el Territorio en una cárcel que las rejas seamos los propios Vampiros, seamos cadenas que el Ancestro no pueda arrastrar, pero quiero que está habitación se convierta en
— Vladímir Volkov no había dado la orden de atacar, pero él sí había avanzado - Viste que fácil es vencer - El Vampiro había sonreído - El juego ni siquiera ha iniciado y yo he ganado.— Prefiero entregarte todo un Imperio antes de entregarte a mis hijos - Luego de que la Vampiresa haya expresado aquellas palabras el rugido bestial de un Lobo hizo que todos los Vampiros dejarán ver sus colmillos, no hubo tiempo de absolutamente nada, pero la mente de Emma había sido penetrada por una poderosa voz masculina.— Nunca dejaremos que la Hija de la luna esté sola en contra de Vampiros - Era el Alfa y todos los lobos estaban para defender a Emma, los lobos atacaron sin piedad, el odio de Vladímir Volkov no pudo ser contenida al ver que innumerables Licántropos venían para atacarlo y venían para ganar la Batalla.— Los caninos de los lobos habían impactado por el cuerpo de los Vampiros que no se esperaban tener algún contrincante, los lobos despellejan a las criaturas alimentadas de Sangre si