40

Gabriell subió al jets privado, se sentó y abrochó los cinturones de seguridad y el avión levantó el vuelo.

Mirando a la nada, solo pensaba en Arielle, lejos en brazos de Enmanuell.

—¿Cómo pudiste Arielle? Jamás te perdonaré el que te casaras con otro.

Metido en sus confusiones, y los celos, no podía ver lo equivocado que estaba. ¿Cómo una mujer podía organizar una boda si estaba casada con otro?

La azafata se acercó coquetamente, y lo sacó de su distracción.

—¿Que le puedo servir señor Alighieri ? —habló con una sensualidad que no pasó desapercibida para Gabriell, y la miró fijamente achicando sus ojos.

—¿Cuál es tu nombre?

—Nahomi. —respondió con voz seductora.

—Cuando lleguemos a Alemania, recuérdame pasar un memorándum a la administración para que seas despedida, tu trabajo es ser una aeromozas profesional, no haces bien tu trabajo. —habló indiferente y mirando a la nada.

—Disculpe me señor...no creí que ...

—¿Te rechazaría? —completo la frase

—No...no es eso lo que quise dec
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP