SILENCIO

—Hola—. Caminé hacia él y puse mi brazo alrededor de su cuello sólo para aumentar la tensión. —¿Otra vez no te gusta mi actuación?

Pero nada cambió en su expresión facial. Permaneció en silencio y con los ojos fijos en mí. Esto es peligroso, Elena. Le has hecho enfadar.

—Oh, nunca te ha gustado mi actuación—. Hice un mohín de decepción.

Zamir suspiró y perdió un poco la calma.

—Siempre me han encantado tus actuaciones, Elena—. Afirmó, roncamente. —Nunca jamás las he odiado.

—¿Entonces qué pasa? ¿Por qué me miras así?—. Le pongo mis mejores ojos de cachorrito.

—Lo que hiciste ahí fuera es totalmente inaceptable, Elena. ¿No sabías que los hombres se pervierten contigo?—. Está enfadado. Oh, no. —¡Caramba, y llevabas ese trozo de tela! Estás atrayendo muchas atenciones ¡y no me siento cómodo con eso!

—Woah, cálmate, Zamir. No es mi intención que hagan locuras por mí. ¿No quieres eso? ¿Conseguirás más y más clientes gracias a mí?—. Arrugué la nariz.

—No. No quiero que vengan por tu culpa
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP