Jin Fengchen ordenó inmediatamente una investigación para verificar las afirmaciones de Shen Shulan.

En media hora, recibió el informe de la investigación de su subordinado.

Resultó que el Viejo Señor Jiang había dejado un testamento en el que le heredaba a Jiang Sese todos sus bienes muebles e inmuebles.

Eso incluía todas sus acciones del Grupo Jiang. Como fundador de la empresa, era naturalmente el mayor accionista.

Incluso la casa en la que se alojaban Jiang Zhen y Shen Shulan le pertenecía a Jiang Sese. Simplemente estaban ocupando un nido que no era suyo.

Por eso Shen Shulan había aparecido y causado un escándalo.

Jiang Sese se conmovió tras leer el informe; su abuelo había sacrificado tanto por ella sin decírselo a nadie.

Jin Fengchen la abrazó por el hombro y dejó que se apoyara en él. "Ya que estas cosas te pertenecen, ten por seguro que te las devolveré. Ahora mismo, vamos a comer antes de que se enfríe".

Jiang Sese se calmó y asintió.

Después del almuerzo, Jin Fengch