“Además, bajo mi amenaza, el vecino del difunto me dijo claramente que Yao Yao no era filial”.

Bo Gelian frunció el ceño. “Puesto que este vecino conoce la verdadera situación de Yao Yao, ¿por qué no se presentó para aclarar la situación del Grupo Jin?”.

Carl pensó un momento antes de responder: “Hoy en día, nadie se atreve a dar la cara por nadie. Quizás tiene miedo de que, si se revela la verdad, se meta en problemas”.

Bo Gelian arrojó el informe que tenía en la mano sobre la mesa de café. A través de la información obtenida y de lo que dijo Carl, pudo concluir que todo era una obra de teatro dirigida y actuada por la propia Yao Yao.

Sus dedos golpearon suavemente sus piernas y sus ojos se entrecerraron ligeramente. “Si mis conjeturas son correctas, la muerte del viejo definitivamente no es tan simple como parece”.

Al oír esto, Carl dijo: “Señor, no querrá decir...”.

Bo Gelian se giró para mirarlo, y preguntó en respuesta: “¿No te parece extraño?”.

Carl no pensó tanto al princ