Capítulo 25.

Instintos.

Sam a lo lejos gruñe debido al espectáculo que acababa de contemplar, odiaba el aroma de su principal competidor, más aún en la mujer a quien deseaba con locura, en esta cacería intentaría lastimarlo de manera mortal, ya que las heridas de Barack luego del enfrentamiento no mejoraron del todo, su oportunidad se hacía presente y no la desaprovecharía. Cuando los lobos tomaron su forma licántropa, se adentraron a lo profundo del bosque, el entrenamiento era duro, esa noche los Alfas deberían competir entre sí, Hannah leyó las reglas, pero no todo estaba escrito en los libros, a veces necesitaba ver lo que había más allá, eso que sencillamente no se escribía, debía vivirlos.

«La noche de luna llena no hay reglas además de las netamente de supervivencia» Es lo que la joven Edhil había leído, no comprendía muy bien el significado, además de lo literal en esas palabras, ella se quedó cerca de la Elfa con quien estuvo conversando, no faltaba mucho para que fuese media