Punto de vista de Bruno

Óscar se baja de la camioneta junto a sus hombres y sigilosamente se alejan hacia donde se suponen que tienen a Lena, mientras yo me quedo solo con Liah, haciendo el mayor de mis esfuerzos por no vomitar al escucharla a hablar.

–Bruno, ayúdame a bajar por favor. Necesito estar allí –insiste Liah, pero yo la ignoro –, esto te conviene tanto como a mí, te lo aseguro. Si Lena realmente está aquí, yo puedo hacer mucho más por ella que esa cuerda de idiotas.

No puedo negar que su confianza en sí misma se pierde de vista, pero de ninguna manera la voy a dejar salir, no mientras siga pensando que ella tiene algo que ver en medio de todo esto.

–Bruno, sé que lo que te estoy pidiendo es demasiado, pero por favor confía en mí. Tengo que estar ahí, necesito asegurarme de que no le hagan daño a Lena, porque sino…

–Porque sino, no podrías estafarme ¿cierto? –respondo interrumpiéndola.

–No digas eso, jamás he querido estafarte.

–Ya no seas tan falsa, Liah. No tienes que fing