Sue se secó las manos y sonrió. "Fue hecho para usted, señora. Finalmente ha vuelto, así que, por supuesto, tenemos que celebrar".

¡Una celebración!

Yvonne arqueó las cejas y estaba un poco sorprendida. "Sue, no tenías que hacerlo".

"Ahora, siéntese. Son todos sus favoritos". Sue le puso una cuchara en la mano y la instó a comer.

Yvonne no pudo resistir el entusiasmo de Sue, así que tuvo que sentarse. Se metió un camarón en la boca mientras Sue la miraba expectante.

"¿Qué tal?", Sue preguntó. "¿Mis habilidades culinarias todavía están bien?".

Yvonne se tragó los camarones y respondió con una sonrisa: "Está delicioso".

"Siempre que quiera, señora. Coma despacio, iré a la cocina a ver la sopa".

"Está bien”, Yvonne asintió en respuesta.

Sue le dio una palmada en el hombro y se fue a la cocina.

Yvonne se llenó de medio plato de pasta y siguió comiendo sus camarones. En cuanto a otros platos de carne, no los tocó en absoluto y no supo por qué. Simplemente sintió que no t