Llegamos a casa y siento mi estomago apretado, por nervios, lo que es una estupidez, ellos son los que deben tener nervios por mi presencia. Ellos son los que me obligaron a casarme con alguien que no conozco, por su m*****a empresa. Juro que si fuera una mala hija olvidaría todo y no aceptaría el acuerdo, pero no es justo para mi dejar mis estudios por esto, además cuento con el apoyo de Mason.
La puerta es abierta por la encargada de las cosas de la casa, porque si mi madre no es capaz de hacer nada en el hogar.
Me saluda con una sonrisa en el rostro y al ver a Mason se sonroja, claro cualquiera lo haría al ver semejante hombre.
— Buenas tardes, los señores están en el comedor — nos comenta
Ambos entramos a casa, Mason continúa tomando mi mano y la verdad es que no me molesta en nada. Al ver a mis padres comiendo tranquilamente me molesto más de lo que ya estaba, ¿cómo es posible que no estén un poco preocupados por mi? No les importa nada que no sea el dinero, creo que fui una ciega al no darme cuenta que a pesar de las demostraciones de amor de mi padre nunca superé a la empresa, siempre ha sido lo más importante para él y para ella ni siquiera es necesario hacer la pregunta. La respuesta es obvia.
Ambos nos saludan al vernos llegar, la mirada de mi madre se ilumina al verme junto a Mason, yo pongo los ojos en blanco por este hecho.
— Mason, querido, que bueno verte de nuevo. ¿Quieres comer con nosotros? — le dice mi madre olvidando que estoy aquí mismo
— Muchas gracias, pero ya comí. Veníamos por ropa para Paige, tenemos una reunión y quiero que se quede conmigo unos días, para conocernos mejor, ¿les molestaría? — contesta un Mason muy amable
— Oh por supuesto que no, iré a supervisar que la ropa que lleve Paige sea lo necesario para cada salida y reunión que tengas, debes quedar bien con tus socios y amigo por la prometida que tienes — responde mamá sonriendo y tomando mi brazo
Quito mi brazo de su mano de forma brusca, lo que hace que me mire molesta por mi comportamiento
— Yo puedo sola madre. No tardaré nada — digo mirando a Mason
Me doy la vuelta y me voy directo a mi cuarto para organizar varias mudas para estar unos días fuera de casa de mis adorados padres, nótese el sarcasmo. Teniendo mi ropa lista bajo con una pequeña maleta.
Encuentro a mi padre solo con Mason, ni siquiera pregunto por mi madre, miro a Mason y le digo
— Estoy lista — sonrío y él se levanta para ir por mi maleta.
— fue un placer verlo nuevamente señor Harper — dice Mason sonriendo
— Solo William, pronto seremos familia no es necesario la formalidad — contesta mi padre sonriendo
Se dan la mano y mi padre se acerca a mi, solo lo abrazo menos de 5 segundos y me alejo. Veo en el rostro de mi padre el dolor por mi gesto frío, pero no cambiaré mi actitud por su dolor, él no imagina el mio al tener que casarme con Mason.
Avanzamos hasta la salida, sin embargo mi madre nos detiene llegando a la puerta, bufo por tener que verla de nuevo, no me apetece nada estar en esta casa por ahora.
— Cariño, ¿no se irán sin despedirse? — dice poniendo una mano en su pecho como dolida
— Creí que estabas ocupada, madre — contesto sin voltear
— Nunca para mi princesa — dice la muy cínica
Creo que después de tantos años nunca conocí a mi madre de verdad, nunca en su vida me ha llamado así a menos que sea en público, lo que es solo para quedar como una madre amorosa delante de los demás.
— La verdad es que es mi culpa, tenemos algo de prisa y por eso insistía Paige para irnos enseguida, lamento eso — dice mi prometido
Nota mental, agradecerle a Mason por decir eso a mi madre.
El rostro de mi madre cambia enseguida por una sonrisa, se acerca a él y le dice
— Querido, no te preocupes, entiendo. Espero que puedan conocerse bien y quien sabe si llega a enamorarse más adelante — comenta riendo
— Aja lo que tu digas madre — murmuro, pero Mason si escucha lo que digo
Toma mi mano y se despide de mi madre, para salir de esa casa que durante tantos años fue mi hogar y ahora la siento solo una casa vacía y falsa.
Nos subimos a su auto y tomamos camino al hotel donde nos estamos quedando. Guardo silencio mientras pienso en todo y en lo que se viene más adelante. Es algo que no puedo evitar pensar, ya que en unas semanas comenzaré a vivir con Mason y no sé nada de él. Solo que tiene la misma idea que yo, ,solo amigos y después de los tres años cada uno sigue con su vida.
— Gracias por salvarme de mi madre — rompo el silencio
— No creas que fue gratis eh, después tendrás que salvarme de la mia que me sigue viendo como un bebé — bufa y pone los ojos en blanco
— Me gustaría ver eso — digo sin pensar
— Lo verás, créeme que si y lo vas a disfrutar — contesta
Después de esas palabras suena su celular y contesta con el altavoz
— Dime — dice con voz neutra
— Esa es la forma de saludar a tu madre? — le dice una mujer molesta
— Madre, ¿a que se debe el honor de tu llamada? — contesta poniendo los ojos en blanco Mason
— ¿Cuándo vas a traer a tu prometida a casa? Sabes que no estuve bien de salud anoche y no pude asistir anoche. Van demasiadas horas esperando y tu ni ganas de venir — dice enojada
— Madre, hoy tengo una reunión de trabajo y no podre…— su madre le interrumpe y no lo deja terminar
— Oh no, claro que no, de esta noche no pasa para que vengan, a la hora que termines la reunión, da igual la hora que sea y no acepto ninguna excusa. Puedes tener 26 o 50 años eso no será impedimento para que me hagas caso, recuerda que soy tu madre — exclama muy molesta
Me estoy aguantando las ganas de reír, para que no me escuche. Miro a Mason y está sonrojado, primera vez que lo veo así, creo que adoro a su madre y eso que ni la conozco.
— Hablaré con ella, mamá — dice con los dientes apretados
— Bien, espero entonces — dice con voz dulce — Sé que está contigo, no cortes, esperaré la respuesta — al escucharla abro los ojos y dejo de reir
— Claro que podemos ir, señora…— dejo en el aire la frase porque no se su nombre
— ¡Mason!¿Cómo es posible que ni siquiera le has dicho el nombre de tu madre que te ama y adora con todo su corazón? No sabes cuanto me duele saber esto — dice y se escucha dolida
— Mamá no te pongas así estamos recién conociéndonos — se justifica Mason
— Mi nombre es Emily White, solo dime Emily. Disculpa por mi forma de hablar con el desconsiderado de mi hijo, no sabía que estabas escuchando la conversación — comenta con pena
— No se preocupe, entonces nos vemos esta noche Emily — le digo sonriendo
— Querida, esperaré ansiosa. No te imaginas las cosas que tengo que contarte de Mason, claramente todo acompañado de fotografías de su infancia — me dice emocionada
— Mamá no hagas eso, vas a hacer que no quiera estar conmigo — dice sonrojado mi prometido
Termina la llamada, yo riendo, él molesto y avergonzado.
— Mi madre es bastante especial como pudiste darte cuenta — me dice sonrojado
— Me encanta, estoy ansiosa de ver esas fotografías — le digo guiñando un ojo
Me sorprende lo bien que me llevo con Mason, no soy así de decir bromas y reír con cualquier persona, pero siento que somos bastantes similares en personalidad y eso nos ayudará bastante para sobrellevar nuestro “matrimonio”.
Al llegar al hotel me doy un baño, después me maquillo, seco mi cabello y me visto. Estando lista salgo y encuentro un Mason vestido con jeans y camiseta, se ve muy bien, creo que podría darme un poco de piernas y trasero a mi.
No me doy cuenta de que me lo estoy comiendo con la mirada hasta que pone su mano en mi mentón y limpia como si estuviera babeando por él.
— Cuidado y después no te caes sobre tu charco, me hace sentir halagado tu expresión — me dice riendo
— No es cierto, solo estaba pensando en otras cosas, no mirándote, no te creas guapo — contesto tomando mi cartera para salir.
Mientras vamos en camino, me toca aguantar las bromas de Mason sobre mi mirada al verlo. No digo nada y me quedo en silencio, cuando siento que voy a reventar por tantas cosas que me dice lo miro seria y le digo
— Continúa, cuando estemos con tu madre no dejaré de pedir fotografías tuyas — digo sonriendo y deja de reír para poner cara de susto
— Solo bromeaba, no tienes que ser así — me dice apenado
— Creo que me llevaré muy bien con tu madre — digo con duda
— Pues si creo que se llevaran bien — me dice resignado
— ¿Ella sabe que todo es un contrato? — le pregunto porque eso ha dado vueltas en mi cabeza durante me arreglaba
— Lo sabe, golpeo a mi padre por eso, pero dice que es la única mujer que conocerá como mi esposa, dice que nadie me aguantaría para estar a mi lado por voluntad. No puedes quejarte de tu madre sabiendo que la mía dice que nadie me querrá a su lado — me explica y comienzo a entender su trato como si todo fuera real.
— Entiendo, entonces con ella será como si fuera real lo nuestro, quiero decir sabe que es mentira, pero me tratará como tu pareja de verdad — le digo analizando todo
— Eso mismo, espero que le tengas paciencia, es muy amorosa — dice bajo
si supiera que la mía es todo lo contrario, lo más fría posible. Creo que Emily será la madre que no tuve, al menos por estos tres años.
Sin darme cuenta llegamos donde será la reunión. Nos bajamos y estamos en una casa muy elegante, nos recibe un señor que nos comenta que nos esperan en la sala. Al entrar veo que es una pareja joven, imaginé que serían de unos 50 años, pero no tienen más de 39 años cada uno. Pasamos y me presentan, me sorprende ver que mas que socios son amigos.
— Paige, te presento a mi mejor amigo y socio Ethan y su esposa Sarah — dice Mason
— Hola Paige, un placer conocer a la mujer que pudo ponerle el lazo a mi amigo — dice Ethan
— El placer es mío — contesto nerviosa
— ¿Me acompañas? Me siento feliz al fin tendré con quien conversar cuando hablan de negocios, me aburría horrores sola — me dice Sarah
— Claro — digo mirándola
Avanzamos y no alcanzo a dar dos pasos cuando Mason toma mi cintura y me dice en el oído
— Lamento no decirte que era mi mejor amigo, es de negocios esta reunión — me aclara besando la comisura de mis labios
Me quedo congelada por su actitud, hasta que me doy cuenta de que sus amigos no saben sobre el acuerdo, bueno que estaba estipulado que nadie debía saber más que nosotros.
Sonrío y me voy junto a Sarah.
Vamos al jardín donde tiene una mesa muy bien arreglada, nos sentamos y me preparo mentalmente para las preguntas que estoy segura me hará Sarah.
— No te preguntaré nada, al contrario, quiero conocerte como mujer, no como novia de Mason, sin embargo te contaré de mi para que entremos en confianza — me dice sonriendo — ¿Quieres? — me señala una jarra con lo que creo es un trago con alcohol
— Claro — me sirve una copa y está delicioso
Me cuenta sobre ella, que lleva casada con Ethan solo 4 años, tiene 32 años y él 35. Se conocieron mucho antes, eran amigos antes de ser pareja y con Mason se conocen hace muchos años.
Hola! Espero que les guste la historia, recuerden comentar y pueden encontrarme en redes sociales con mi nombre de autora.
Continuo mi charla con Sarah, es una chica muy agradable, me prohibió decirle señora, ya que ella dice que su edad mental es igual o menor a la mía. Eso me causo mucha gracia.− Mason es un buen chico, aunque si el dices que te comenté esto lo negaré toda mi vida. Lo conozco hace demasiados años, lo que me lleva a decirte que no vas a tener problemas con él de ningún tipo, pero si le mientes y traicionas su confianza perderás todo el amor que sienta por ti − me dice dejando de sonreíCreo que hay algo en su forma de decirme esto, que me hace cuestionar sobre lo que no me esta contando. No le pregunto nada, se supone que llevamos una relación de verdad con Mason y nadie debe saber sobre el contrato que nos unió, es mejor dejar así los detalles.− No tengo intenciones de dañar a Mason y si algo me caracteriza es mi sinceridad, creo que es una de las cosas que hizo que él se fijara en mi – comento nerviosa− Nos vamos a llevar muy bien, a veces esos idiotas que están hablando
Narra MasonSoy un hombre que no quería relaciones serias, al contrario, amaba mi soledad, hasta que llego ella. Solo basto una mirada para darme cuenta de que sería mi perdición. Pelirroja, esbelta y unos ojos verdes hipnotizantes. La vi solo una vez y quede embobado, no descansé hasta saber quien era y todo para nada.Si, para nada, cuando al fin estoy decidido a tener algo serio con alguien llega mi padre diciéndome que debo casarme por tres años o perderemos toda la empresa. Mi primera reacción fue reírme, no le encontraba gracia a su broma, sin embargo, después de reír me di cuenta de que no es una broma, hablaba en serio.Me explica sobre el acuerdo que firmó cuando yo era un niño, me cabreo, me enfurezco. Justo esa mañana había invitado a desayunar a Peyton, venia feliz después de verla, ella me había dado la oportunidad de conocernos y ahora resulta que me tengo que casar. Es predecible que ella no querrá volver a saber de mí.Mi padre me cuenta sobre el acuerdo, me entrega una
Narra Paige:Puedo decir que el día de hoy fue muy bien a pesar del mal rato que tuve cuando fui por ropa a la casa de mis padres. También reconozco que tengo un poco de envidia de Mason, sus padres son lo que siempre quise para mí, solo basta con ver las miradas al tenerse cerca para entender el amor que se tienen. Creí que ese tipo de amor no existía hasta el día de hoy.Estoy en la habitación pensando en todo lo que paso en el día, es demasiada información la que tengo que procesar, por un lado, esta Sarah con Ethan, los que me agradaron mucho, así como también los padres de Mason.No soy tonta y pue darme cuenta que con su padre la relación no está muy unida que digamos, sin embargo, no quise preguntarle a Mason sobre le tema. No se hubiera sentido muy cómodo despué
Sin pensar mas salgo de la suite. Tomo camino a la cafetería donde siempre íbamos en nuestro noviazgo, recordar esos momentos me hace volver el tiempo atrás, siento como si fuera a una cita con él, cuando eso ya no volverá a sr posible. Me duele recordar que estaba muy enamorada de él, estaba dispuesta a dejar todo por ir junto a él, por seguir siendo su novia. Lamentablemente solo era yo la que estaba enamorada, Dylan o sentía o mismo por mí, ni siquiera la mitad, ya que a la primera oportunidad que tuvo me engaño con otra chica que solo le coqueteo.Sin darme cuenta el taxi se detiene y le entrego el dinero, bajo nerviosa. Miro la hora y me doy cuenta de que llegué con cinco minutos de retraso, me acerco a la puerta y me sorprende ver que ya esta aquí, si la puntualidad nunca fue una de sus virtudes, pero creo que nunca es tarde para cambiar ci
— Bien, creo que entiendo toda la situación con tu prometido y futuro esposo, lo que me cuesta entender porque Mason te hizo firmar un acuerdo donde dice que serán sinceros para tener una buena relación, pero me cuentas que hablaba por teléfono extraño y que lo has visto con una chica. Si quieres puedo ayudarte en ese aspecto, comprenderás que como abogada busco pruebas cuando viene por divorcios por infidelidad, por lo que tengo un equipo detrás de mí. Ellos pueden decirte en horas quien es la mujer y que relación tiene con tu futuro esposo. Eso te ayudaría a estar preparada ante cualquier movimiento extraño que surja de parte de él y como consejo personal, n vuelvas a firmar nada hasta que yo lo lea, no seas tan confiada en alguien que estas recién conociendo — me aconseja y tiene toda la m*****a razón fui una tonta— Lo haré, por ahora te dejo los documentos, tienes mi numero y me llamas ante cualquier cosa que sea, hasta la mas insignificante — digo seria— No te preocupes, a
Al día siguiente me levanto temprano, debo ir por mis cuadernos a casa de mis padres, no me gusta la idea, pero es justo y necesario.Mi amiga Riley dice que tiene cosas que hacer, como comprar sus cosas para las clases. Lo bueno de todo es que estudia lo mismo que yo, así que, aunque no nos veamos en las clases por los distintos horarios, lo bueno es que podemos estudiar juntas para los parciales.Tomo un taxi en la universidad y me dirijo a la casa que me albergo por toda mi infancia. Al entrar me doy cuenta que mis padres no están, mi padre debe estar trabajando y mi madre de compras o algo así. Aprovecho que no hay nadie y ordeno otro poco de ropa, mis apuntes de años anteriores y cuadernos que tenia comprados de antes para las clases, si, siempre he sido muy organizada con mis cosas.Tomo las llaves de mi auto, si lo sé teniendo auto andaba en taxi, simple, la razón es que quedo en esta casa cuando me fui con Mason y seguramente mi padre dio por sentado que él sería el encargado
Después de no sé cuánto tiempo por fin me suelta, debo agregar que la señorita aquí a mi lado no me ha dejado verme en un espejo, así que no se que me hizo.— Estas lista — me dice emocionada y aplaudiendoMe levanto en silencio y busco el espejo de cuerpo completo que tiene Riley en su lado de la habitación. Al ver mi reflejo quedo impresionada, no esperaba semejante cambio, digo mi madre siempre me ha maquillado, bueno no ella directamente, pero nunca me había visto tan linda como ahora. Me he quedado sin palabras al mirarme, es que no imagine que podría verme tan diferente, la ropa que llevo no es la que use normalmente, ya que siempre he sido de vestir jeans, camiseta y una sudadera, si bien también uso vestidos y faldas, no siempre han sido de este tipo.Para que me entiendan les voy a describir mi ropa, estoy un vestido negro, pegado al cuerpo, muy pegado, resaltando mi figura en toda la extensión de la palabra, unas botas bucaneras (hasta encima de la rodilla) negras también
Bajamos del auto y entramos, la persona que nos recibe nos hace pasar a una mesa reservada, no tenia idea que se podían reservar, se nota que viene seguido.— ¿Qué deseas comer? — me pregunta mirando la carta— Recomiéndame, ya que conoces mejor que yo el lugar — le respondo sonriendo— Bien, tráigame lo que pido siempre — le dice a la señora que nos esta esperandoLa señora se retira y me doy cuenta que la mirada de Mason sigue en mí, ya me esta empezando a hacer sentir incomoda— Deja de mirarme — digo sonrojada— Lo siento, es que de verdad me sorprendes, quiero decir, no es que no viera que eres hermosa, eso lo supe cuando te vi para la cena de compromiso, pero creo que no te habías sacado provecho como se debe. Tendré que tener cuidado con los hombres que quieran quitarme a mi prometida — me dice guiñando un ojo— Te recuerdo que solo estaremos tres años casados, además no vas a estar sin tener sexo durante tres años, yo obviamente tampoco — digo riendo— Si,