—Camila: Madre y Padre por favor, no se pelean por eso al echar la culpa uno al otro; ¿Me pueden decir cuál es el problema por favor? Si yo no he hecho nada malo, aun soy la misma Camila, solamente ahora estoy enamorada de una persona. Nadie tiene la culpa de nada.

Don Andrés: Cállate niña insolente, piensas que te voy a dejar echar la vergüenza en mi familia. Mañana hablaré con el Padre de la iglesia para que te pueden encerrar por algunos días para curarte de esa enfermedad, ya no había nadie en mi familia que fuera así. Qué vergüenza nos está dando Camila, no esperaba eso de ti, de ti no.

Camila: Pero, padre por favor eso no, por favor no estoy enferma, estoy totalmente bien de salud, no tengo nada malo. Usted no me puede hacer eso, yo solamente estoy enamorada de una persona maravillosa. Ma por favor habla con mi papi, por favor ma.

María: Lo siento no puedo hacer nada por ti, porque yo también creo que debes ir allá, no quiero una hija homosexua