Alessandro
Me pierdo en mis pensamientos, mientras contempló a mi mujer, que luego de la larga charla que hemos tenido ha quedado profundamente dormida. Se ve tan serena, tiene su ceño levemente fruncido, mientras que su boquita carnosa se encuentra entreabierta, quedando como la criatura más bella que han visto mis ojos.
Yo no podría pegar el ojo en todo el día, después de todo lo que me he enterado. Aún no puedo creer que quien consideraba mi amigo, se haya atrevido a lastimar a mi mujer, aunque me haya quedado un poco tranquilo al saber que no logro abusar de ella, lo que le dije es verdad lo mataré cuando tenga la oportunidad. El simple hecho de pensarlo me enloquece, todos pasaron sobre mí para lastimarla. Efectivamente, Isabelle pasó por todo lo que me ha dicho el investigador.
Lloraba mientras me contaba lo asustada que estuvo cuando se quedó en la nada, no ten&i
Isabelle No puedo creer que ya haya pasado dos semanas desde que estoy internada, muchas veces he tenido ganas de irme, es que odio no poder hacer nada, mis días se basan en desayunar, mis revisiones, las cuales son constantes por lo rápido que ha avanzado la enfermedad, además, de que he tenido recaídas. Ya hace más de un mes que no sé nada de mis bebés, los extraño demasiado, quiero tenerlos conmigo, abrazarlos fuerte y nunca más soltarlos. Desde el día, en qué Alessandro me beso, y que le respondí, nos hemos distanciado más de lo que estábamos, solo se limita a cuidarme, sé que no ha dormido en mucho tiempo, le he dicho que no hace falta que se quede, pero es un necio. Lo último que necesitamos en estos momentos es que se enferme, me guste o no ahora mismo mis hijos y yo dependemos
Narrador omnisciente26 años antes. (1995)- ¡Mami! ¿Dónde está lucecita?- pregunto el niño cuando vio llegar a su madre, corrió hacia su encuentro, durante el embarazo se mostró muy protector, estaba entusiasmado con la idea de ser el hermano mayor. Al ver a su madre con el semblante triste y sin su hermana, la miro con sus ojitos tristes esperando una explicación. Se supone que hoy su madre Gabriella, traería por fin a su hermanita, y podrían estar todos juntos, como lo que eran una familia. Pero en cambio, ahí se encontraba sin ella, y con su padre consolándola.-Andriano, tu madre debe descansar. Hablaremos más tarde.- dijo su padre, el niño con tan solo cuatro años era muy entendido y tranquilo. Haciendo caso a lo que su padre le pidió, se dir
AlessandroUna de las cosas que me preocupaba bastante era el peligro que representaban esos seres despreciables que ni siquiera merecen ser nombrados, gracias a la ayuda del fiscal, y mi abogado que junto a mi cuñado pudieron encontrar pruebas que los acusen. Finalmente, están tras las rejas como lo que son, unos malditos delincuentes, fueron acusados por varios delitos que tienen que ver con nosotros, pero otros me han dejado asombrado, ¿Cómo es que no lo vi antes? ¿Cómo siquiera los considere parte de mi vida? El dinero y los cheques que me hicieron creer que fue robado, falsificado y transferido a una cuenta falsa por mi esposa, en realidad ellos fueron los responsables .Debo admitir que eso me mantenía muy ansioso y estresado, y si a eso le sumamos que el doctor me ha dicho que de mi esposa puede morir, ¿Por qu
IsabelleDesayuno mientras observo lo nervioso que está Alessandro, ¿Qué me estará ocultando? ¿Qué es lo que le preocupa tanto? Sé que no tiene que ver con Lorenza y Elliot, hace unos días estaba mirando televisión para distraerme, y justo en ese momento me enteré que ellos estaban presos, hablaban de los delitos por lo que fueron acusados, Aless estaba conmigo e intento apagar el aparato, para evitar que me alterará. No dije nada, solo observé las noticias sin mostrar ninguna emoción, ¿Me tendría que alegrar por qué por fin están en la cárcel? ¿Cómo hacerlo si merecen más que estar en ese lugar? Me torturaron, pusieron en peligro mi vida y lo más importante la de mis hijos, nos separaron porque no le convenía a
IsabelleTrato de recuperarme por tercera vez, hoy en particular la he pasado espantoso en la quimioterapia, desde que ha terminado he estado devolviendo lo poco que logre ingerir, Alessandro sostiene mi cabello al mismo tiempo que hace pequeños masajes en mi espalda. Odio que me vea en esta situación, me siento tan débil y estoy segura que no me veo nada bien, sé que en cualquier momento me desmayare, sabía que podía ser difícil, pero jamás imagine que me tratara tan mal. Cuando parece que no volveré a vomitar me levanto para ir a lavarme los dientes, trato de separarme de él, pero es un terco que me lleva en sus brazos como si no pesara nada, y bueno tal vez no lo haga en estos momentos, sin fuerzas para luchar, escondo mi cabeza en su cuello tratando de disminuir las punzadas de dolor que siento.
Ya ha pasado el finde semana, con Alessandro hemos dejado de lado nuestras diferencias para compartir buenos momentos con nuestros hijos, ellos estaban emocionados de tenernos a los dos. Andriano se ha ganado el cariño de todos, y en especial el de mis soles, ellos lo llaman tío. Mis niños son los más emocionados con el tema de su padre y tíos, y es que solo nos tenían a Zoé y a mí.Ahora mismo, me encuentro en el baño de la clínica, me han dado una bata, si se le podría llamar así, en una hora me llevarán al quirófano, no es doloroso según los médicos y tampoco largo, pero puede tener consecuencias y eso me asusta. Bueno en realidad aparte de los mareos, náuseas y sangrado nasal, he visto como poco a poco voy perdiendo cabello, es una de las consecuencias que más me afecta, luego del trasplante hay un alto porcentaje de perder todo mi cabello. Y tarda
IsabelleMe encuentro impaciente esperando a que vuelva Aless, hoy me dan el alta, él fue a pagar los gastos y firmar los papeles correspondientes. Ya ha pasado un mes desde la intervención, no diré que todo ha salido a la perfección, porque estaría mintiendo. La primera y segunda semana fueron las peores, no podía ingerir nada porque lo terminaba expulsando, en consecuencia me mantuvieron a base de sueros. Por otro lado, tuve una infección bastante grave y fiebre, estuve como cuatro días prácticamente inconscientemente.Ya la tercer semana estuve mejor, no estoy para saltar de la alegría, pero se ve la mejoría. Ahora empieza el verdadero reto deberé mantener una estricta dieta, y hacer caminatas diarias, no puedo hacer nada de fuerza. A
IsabelleSonrío somnolienta cuando siento las caricias de Aless en mi rostro, entre abro los ojos tratando de adaptarme a la claridad, y logro ver sus preciosos ojos azules mirándome con intensidad.-Buenos díasamore mio.- saluda dejando un casto beso en mis labios, yo por mi parte coloco mis manos entrelazadas detrás de su cuello.- ¿Has dormido bien?- pregunta al mismo tiempo que se agacha para dejar besos húmedos en mi cuello, suspiro ante sus caricias.-He dormido de maravillaamour.-susurro a centímetros de sus labios, cuando deja de atacar mi cuello.- ¿Y tú?- digo admirando esos ojos que me miran con amor y los cuales me enloquecen.