NATALIE
°° ♡ °°
El día de ayer fue muy cansado, después de que Dominik subiera el equipaje a la habitación, desempaque mis pertenecías. El seguía sin decir nada, había vuelto a su postura seria y fría, y por un segundo pensé cuando seria que se abriría más y así me dejara entrar en sus sentimientos.
No podía seguir engañándome a mi misma, el me importaba y quería que nuestra relación o lo que sea que tuviéramos fuera buena. Él fue el que propuso eso y ahora había vuelto hacer el mismo de antes.
No podía convivir con alguien así, pero por alguna razón no me atrevía a dejar las cosas mal, quería llevarme bien con él y no sabía el por qué. Necesitaba hablar con él y aclarar muchas cosas. Pero lo primero que iba hacer era ducharme.
Me levanto de la cama, los rayos del sol ya estaban asomándose por la ventana. Estaba acostumbrada a madrugar desde
NATALIE °° ♡ °° Me quede inmóvil cuando sentí su respiración en mi cara, anhelando ese beso. Un beso que nunca llego. Abrí mis ojos y parpadee confundida, como si hubiera recordado algo o como si estar cerca de mi le quemara, se apartó. Dejándome aturdida y sin palabras. ¿Qué había pasado? No pregunte y ni dije nada, solo lo mire, tratando de averiguar que cruzaba por su mente en estos momentos y el porque del rechazo. Que tonta soy, no creí que le fuera indiferente. Pero ahora lo sé y con esto me quedo mas que claro. Sin volver hablar ni pronunciar un sonido, se gira y sale por la puerta, dejándome ahí sola y humillada. Así es como me sentía ya que había hecho el ridículo cerrando los ojos y esperando ese estúpido beso. Deje atrás ese asunto para intentar borrar esa escena vergonzosa y antes de quitarme
NATALIE °° ♡ °° ―Hola ―dije por fin, tendí la mano para estrechar la suya en un saludo, pero la mujer omitió eso para abordarme con un gran abrazo atrapándome en su pequeño cuerpo. No esperaba esa reacción de ella, no les conocía y no tenía ni idea de porque me trataban como si me conocieran de toda la vida. ―Es guapísima, ¿verdad cariño? ―dijo la mujer, se apartó. ―Lo es ―le respondió él ―Hola, soy Kenneth, pero puedes decirme Ken ―dijo, dándome un apretón firme y amable en la mano ―Ella es Zoe, mi esposa ―señalo a la mujer que seguía viéndome con adoración. Sus ojos brillaban de emoción y con esa sonrisa que no dejo su rostro en ningún momento. Cuando dijeron sus nombres recordé que Dominik los había nombrado antes. Así que ellos eran los amigos que había dicho, la verdad e
NATALIE °° ♡ °° Eso solo respondía a mi duda, él era ese chico. Pero era extraño, ¿Por qué no lo había reconocido antes? Si era así había cambiado mucho. No estaba segura de ello, debía primero averiguarlo, y la mejor manera era preguntarle directamente. Una vez que Zoe se marchó me quede sentada frente a la chimenea esperándolo, no sé porque estaba segura de que volvaria cualquier hora de la noche. Si no estuvo en todo el día porque llegaría ahora. Tal vez esa fue su intención, tráeme aquí para deshacerse de mí estando ya casados. Pensar en eso me molestaba, no sé porque por un instante creí que pudiera interesarle de una forma distinta a la que me pidió casarme con él. Que ilusa soy. Sé que soy una novata en eso de las relaciones o sentimientos, pero lo que si no sabía era lo que estaba comenzando a sentir. De lo que si estaba segura era que él me gustaba de una
Natalie °° ♡ °° Cerré los ojos y me deje llevar. Me puso de espaldas contra la chimenea, el porrazo fue algo fuerte pero ninguno de los dos nos detuvimos. Una de sus manos ya estaba en mi cabeza cubriendo el golpe. Presiono su cuerpo contra el mío, como si me fuera a escapar. La piedra de la chimenea se clavaba en mi espalda, pero no le tome importancia. Estuve esperando tanto esto, que nada iba hacer que lo interrumpiera. Podría pasarme horas así con él, con su aroma impregnando mi piel, me estaba volviendo loca. No separamos los labios en ningún momento. No sé en qué momento sus manos se dirigieron a mi trasero y yo automáticamente le rodee la cintura con mis piernas, mientras que mis brazos también lo hicieron en su cuello. Me consumía el deseo, me presione mas a él. Necesitaba sentirlo mas, estaba perdiendo el control. Bajo de mis labios
NATALIE °° ♡ °° Su pecho se movía arriba y abajo mientras me miraba. Mis ojos se fijaron en los suyos mientras perdíamos rápidamente la ropa, quedándonos completamente desnudos. Me observaba con mucha atención, con una expresión seria pero con un deseo avivar que destellan sus ojos. —Eres hermosa —susurró, se colocó a mi lado y acarició mejilla. Una caricia sencilla, un toque simple que me llevaba a las nubes. Para mí significaba mucho. No sabía que responder, así que solo agradecí. —Gracias... —con voz tímida y sonrojada. Nunca pensé que llegaría ser hermosa ante sus ojos y mucho menos que me lo llegara a decir. Me besó de nuevo, pero esta vez con más intensidad que la anterior. Bajo de mis labios hasta mi cuello para después terminar en mis pechos. Me provocó un fuerte jadeo cuando presionó su cara contra mis senos y los
NATALIE °° ♡ °° Había perdido todo control en mí entregándome a él, y estaba feliz por ello. Pero no había manera de que tuviéramos algo más que esto, como una relación verdadera. No tenía sentido quedarme y pasar la noche a su lado, eso solo haría las cosas más difíciles para mí, ya que para él sería algo sin importancia. Porque para Dominik no significaba nada. Me aleje y me levante para buscar inmediatamente mi ropa. Sin necesidad de ponerme nada me encamine a la puerta para salir de ahí. Dominik apareció en el umbral de la habitación del baño con solo unos bóxer negros puestos, se miraba tan sexy y apetecible. Tuve que apartar la mirada de su pecho desnudo al mismo tiempo que sacudí mis pensamientos impuros sobre él y seguí con lo mío saliendo por fin de su dormitorio. Prácticamente salí corriendo de ahí y entre rápidamente a mi dormitorio cerrando la puerta con la misma velo
NATALIE °° ♡ °° No habíamos establecido los límites de nuestra relación. ¿Ahora que significaba el matrimonio para los dos? Yo quería que pasáramos tiempo juntos, pero también tenía otras cosas en mente. Tener un mejor trabajo, conseguir ser una buena diseñadora de modas, solo pensaba en mi futuro, en mi sueño. ¿Se supone que debo preguntar? Creo que era mejor quedarme callada, después de lo que ocurrió en la cocina, no me atrevía hacer ese tipo de preguntas. ― ¿Todo bien? ―dijo, retrocediendo después de dejarme en el sofá. Nos habíamos tocado en la cocina, aun no teníamos sexo de nuevo. No quería estropearlo con mis cosas así que asentí en respuesta y le mostré una pequeña sonrisa para que no pensara que me sentía inquieta por nuestra relación. Nuestros labios se encontraron nuevo cuando se inclinó conmigo en el
°°DOMINIK°° El pasado había vuelto a mí, algo que quise por mucho tiempo. Y hoy me preguntaba ¿Todavía quería esto en mi vida? Desde que probé sus labios, su piel, su esencia, ya no quería alejarme de ella. Natalie me sonríe con complicidad, con eso me di cuenta lo relajado que estaba. En estos momentos solo pensaba pasar el tiempo con ella, ahora nos compenetramos muy bien, y no sé porque demonios perdí varios meses discutiendo con ella sin darme cuenta de varias cosas. Ahora quería recuperar eso, y tenerla así como la tengo en estos momentos, abrazada y pegada a mi cuerpo. Durmiendo juntos en la misma cama todas las noches ¿En serio quería esto? En mis planes no estaba compartir mi vida con alguien más, y menos de esta manera. Pero desde que descubrí que ella y la hermosa pequitas son la misma todo comenzó a cambiar. Desde el primer día que nuestros ojos se