♡ ESPECIAL #7 ♡ …………………………………………….. —¡CONNIE! ¡CONNIEEE! ¡Los gritos de Maray resonaban en el exterior de la puerta! Ella golpeaba y forzaba para abrir la puerta de esa habitación… ¡Pero era inútil! PUM~ PUM~ —¡CONNIE, ABRE LA M@LDITA PUERTA! —tras ese grito, Maray sintió que sus puños sobre la puerta comenzaron a enfriarse a una velocidad aterradora— ¡AY! ¡MALDICIÓN! —gritó esa hembra pelirroja cuando el hielo por poco le quema las manos. —¿Aún no abre? —le preguntó Alfa Rezef, que venía a pasos rápidos junto a Connor. —¡No! ¡Haz algo! —gritó Maray, la frustración visible en su rostro. Alfa Rezef utilizó su don, intentando observar el interior de la habitación… Pero… ¡SOLO VIO HIELO! ¡Un hielo de esa magia pura que le impedía observar el interior! Ese Alfa gruñó con molestia. Tomando la forma de Ray, su lobo, embistió la puerta una y otra vez, hasta que el hielo en el interior cedió y se hizo pedazos. ¡CRAAANK! ¡Un poderoso estruendo resonó en el interior del
♡ ESPECIAL #8 ♡ …………………………………………….. La luz de la luna, con su resplandor plateado, bañaba el colosal templo de Noche Carmesí, transformándolo en un santuario de misterio y poder. En medio del bosque, el templo de rocas negras se erguía majestuoso e impecable. A su alrededor, una barrera mágica, establecida por Alfa Ginne en tiempos pasados, y fortalecida actualmente con la magia de Luna Maray, emanaba una energía intimidante, protegiendo su sagrado terreno del mundo exterior. En la gran pared frontal del templo, cinco agujeros con formas de luna estaban cubiertos por cristal carmesí, y la luz de la luna se filtraba a través de ellos, llenando el interior con una inquietante y vibrante luz roja. En el altar, una mesa rectangular de cristal rojo se ubicaba en el centro, donde yacía la niña loba Connie, inconsciente, su cuerpo helado como el hielo debido a la poderosa magia que habitaba en su interior gracias al Rey dragón, un poder colosal que no podía controlar y que la
♡ ESPECIAL #9 ♡ …………………………………………….. Corriendo entre la espesura del bosque, su vista se paseaba por los alrededores, sus ojos de un color rojo sangre, su loba interna alerta a cada movimiento mínimo. Entre más avanzaba a la parte frondosa del bosque, donde la maleza sobrepasaba el metro de altura, Luna Maray, se percató de un frío extraño que iba en aumento. "¡Es Connie!" Pensó cuando el aroma de la niña-loba, llegó a sus fosas nasales. Maray apresurada, corrió en esa dirección, los minutos continuaban pasando y ella por supuesto, entre más se acercaba al aroma de Connie, más sigilosa y alerta se ponía, hasta que… Vio el hielo, colina arriba, en las rocas enormes de varios metros de altura que se amontonaban subiendo a una parte más alta de la montaña. Las marcas de hielo eran visibles, el frío aumentaba, una sensación mágica en el aire, y al aroma de su hija. Luna Maray, tomó la forma de Arin, su loba. Escalando con gran facilidad hasta llegar nuevamente a tierra firme
♡ ESPECIAL #10 ♡ …………………………………………….. —¡¡CONNIEEE!! —gritó Maray corriendo hacia la niña. El corazón de esa hembra latiendo aceleradamente. Asustada temiendo por su hija, pero antes de que se acercara lo suficiente. ¡Un enorme torbellino rodeó a la niña-loba! ¡Un torbellino helado con un brillo blanco cegador! —¡¡Maldición!! —rugió Maray, que en segundos hizo una cortada a su mano, recitando un poderoso hechizo— ¡NO DEJARÉ QUE LASTIMES A MI HIJA! ¡Luna Maray corrió a toda prisa hacia la tormenta mágica que envolvía el cuerpo inconsciente de Connie! ¡PUUUUM! ¡Sin embargo, fue a dar metros en la distancia! —¡AAAAHH! —gritó esa pelirroja, cuando terminó cayendo por el borde de la alta colina rocosa, agarrándose a tiempo antes de caer rodando entre esos picos peligrosos de piedra. Maray comenzó a escalar nuevamente, sin darse por vencida… Una sonrisa curvó sus labios, cuando vio que logró su cometido. El cual no fue invadir la magia o atacar, si no, simplemente dejar q
♡ ESPECIAL #11 ♡ …………………………………………….. >>> Connor: Bajo la primera luna llena del verano. Recuerdo perfectamente esa noche, cálida, agradable, en el territorio de Luna Plateada, disfrutaba el festival luego de mi sucesión como Alfa. Mi padre, al que finalmente después de años de estar intentando vencer… Lo logré, y fue a mis veinte años. Recuerdo que me dijo: —Estás listo. El momento de hacerme de lado ha llegado. Y es que… No fue nada sencillo para mí. ¡Maldición! ¡Él es un Alfa con mucha experiencia en guerras! Aunque… Anteriormente ya me lo había advertido, cuando me dijo: —No te pondré las cosas fáciles. Para ser Alfa, tienes que ser el mejor. Si no me vences, olvídalo. Te harás viejo esperando. Esas fueron sus palabras, y aunque mi madre le reprendió por eso, no logró convencerlo de ser más blando conmigo. ……. Comencé a alejarme del centro, dejando la compañía de mi primo Arlen, que se volvió mi Beta. Connie se había hecho presente, a pesar de que se volvió l
♡ ESPECIAL #12 ♡ …………………………………………….. >>> Connor: —¿Qué han dicho? —volví a preguntar. Simplemente no podía asimilar lo que recién había escuchado. Mi padre y mi madre, estaban en esa sala de estar del castillo, a solas conmigo. Las serias expresiones de ambos podrían causarle escalofríos a cualquiera. Me comencé a sentir furioso. Esforzándome por retener esa ira y no estallar contra ellos. —Sellamos la magia de Connie y… Te quitamos los recuerdos de ello, les hemos hecho creer a todos que es una loba Alfa normal, pero en realidad ella nació siendo una híbrida hechicera y… —¡Eso no, madre! —la interrumpí, levantándome del sofá individual donde estaba sentado— ¿Dijiste que ella pactó un contrato prohibido con un Rey dragón, para que yo recupere mi vista? —Sí. Connie nunca recuperó sus recuerdos de ese ser y todo lo relacionado a él… Aunque se volvió la Alfa de Noche Carmesí, y despertó su don… Sigue sin… —¿Y tú no puedes devolverlos? Mi madre negó, explicando
Dentro del espesor del verdoso bosque en las afueras de un pueblo humano, Maray acompañaba a su padre, Douglas, que salió de cacería a abastecer su pequeño negocio. Las copas de los frondosos árboles se mecían suavemente con la brisa de la fría mañana, una que anunciaba que podría comenzar a llover más tarde. Entre más se adentraban en la espesura del bosque, un extraño silencio dominó el ambiente; la tensión se sentía en el aire y su padre detuvo los pasos. Él volvió a ver atrás por encima de su hombro a su frágil y hermosa hija de 18 años. Un llamativo cabello pelirrojo ondulado hasta el largo de su cintura y unos grandes ojos celestes que resaltaban en su tez blanca y pequeña carita bien definida, luciendo hermosa, adorable y recordándole a Douglas con cariño la belleza de su "difunta" esposa. —¿Miras el clima, May? —le preguntó el hombre alerta— Será mejor que regresemos. Hoy no hará buen día. —¿Qué?, no papá. Dijiste que era necesario venir hoy~ sigamos un poco más,
Maray abrió sus hermosos ojos celestes, sintiendo de inmediato un dolor recorrer todo su cuerpo de pies a cabeza. —AY~ —soltó ella un gritito, intentando sentarse— ¿Dónde estoy? ¿Dónde estará papá…? —susurró para sí misma sin tener recuerdos más allá de cuando caminaban por el bosque de cacería. En ese instante, el golpe de recuerdos de ese enorme lobo atacándolos, impactó en su mente. Al recordarlo, Maray angustiada sintió su corazón latir aceleradamente. —¡¡¡PAPÁ!!! —gritó ella con voz temblorosa, en llamado de ese hombre humano. Mientras las lágrimas comenzaban a deslizarse por sus mejillas. La sorpresa la invadió, cuando vió la elegante habitación en la que se encontraba. ¡¿DÓNDE RAYOS ESTABA?! Cruzó esa pregunta por su mente. Largas ventanas que mostraban la lluvia del otro lado caer con intensidad. Una habitación de tonalidad oscura y pocos muebles pero bastante hermosa, de madera, así como el piso y las paredes. Ella bajó de la cama, vio que tenía un vendaje