CAPÍTULO 100: UNA NUEVA AMENAZANikolaiEl sol matutino se cuela por las ventanas de la habitación, su cálida luz baña el rostro de Gaia, que está dormida a mi lado. Le miro, sintiendo una paz que creí haber perdido para siempre. Estamos juntos de nuevo, y por primera vez en mucho tiempo, todo parece estar en su lugar. Extiendo una mano y acaricio suavemente su cabello, despertándola con delicadeza.—Buenos días, mi amor —le susurro.Gaia abre los ojos y una sonrisa se dibuja en sus labios. Sus ojos brillan con una mezcla de amor y alivio.—Buenos días, Nikolai —responde, acurrucándose más cerca de mí—. ¿Cómo te sientes?—Mejor que nunca —digo sinceramente, abrazándola con fuerza—. Gracias a ti.Nos quedamos en silencio por un momento, disfrutando de la tranquilidad. Siento que hemos dejado atrás el odio y el rencor que nos separaban. Por primera vez, estamos verdaderamente juntos.Gaia se ríe con timidez mientras acaricio su mejilla, busco sus labios, fundiéndonos en un beso apasiona
CAPÍTULO 101: DECLARACIÓN DE GUERRAGaiaEl aire en el salón principal está cargado de tensión. Todos los Alfas de las manadas reunidas en Sunwood se encuentran presentes, sus rostros reflejan una mezcla de preocupación y resolución. Siento el peso de su expectación mientras me levanto y desenrollo el pergamino que contiene la declaración de guerra del rey Emyr de Miridian.—"Yo, el Rey Emyr de Miridian, en representación de todos los reinos humanos, declara la existencia de los licántropos como una amenaza. En cinco días movilizaré a mis ejércitos para destruirlos a todos."Mis ojos recorren las palabras una y otra vez, tratando de absorber el impacto de la situación. Levanto la vista y encuentro la mirada de Nikolai. Su rostro está endurecido por la furia y el desconcierto que esto nos provoca, pero también noto la seguridad en su semblante. Esto no va a terminar bien si no logro que los humanos entren en razón.—Alfas —comienzo, tratando de mantener la calma en mi voz—, hemos recib
CAPÍTULO 102: LA MÁS FUERTE DE TODOSGaiaLa declaración de Bastian resuena en la sala como un trueno.—No confío en el liderazgo de Gaia para guiarnos a través de esta guerra —proclama, sus ojos destellan con desafío que me hace apretar los puños. Es insólito que esté quejándose de eso en este preciso momento.El murmullo de los otros Alfas se eleva, algunos apoyando su postura y otros murmurando en mi defensa. Siento mi corazón latir con fuerza, pero me mantengo firme. Este es un momento crucial.—¡Esto es una locura! —exclama Thorne, golpeando la mesa con su puño—. No podemos permitirnos estar divididos en un momento como este.Nikolai da un paso al frente, su voz resuena con la misma autoridad y firmeza.—Bastian, ahora no es el momento para cuestionar quién lleva el liderazgo. Nos enfrentamos a una amenaza que podría destruirnos a todos. Debemos estar unidos.Bastian cruza los brazos sobre su pecho con sus ojos fijos en los míos.—Si Gaia quiere nuestro respeto y nuestra lealtad,
CAPÍTULO 103: EL PLAN DE GAIAGaiaLa sala de los Alfas está llena de susurros y miradas expectantes mientras me preparo para hablar. Siento cada mirada fija en mí, evaluándome.—Quiero proponer una solución pacífica —digo con firmeza—. No debemos dejarnos llevar por la violencia y la masacre. Debemos buscar una manera de coexistir con los humanos.La reacción es inmediata. Algunos Alfas se levantan de sus asientos, murmurando con desaprobación. Otros simplemente me miran, incrédulos.—¿Pacífica? —Bastian se burla, todavía está resentido por su derrota—. ¿Después de todo lo que han hecho? ¿Después de que nos declararon la guerra?Tomo un profundo respiro, preparándome para enfrentar su escepticismo.—Nosotros no hemos sido inocentes en todo esto. Llevamos siglos engañándolos. Trayendo humanas a nuestros reinos bajo engaños para aparentar ser humanos, y no olvidemos lo último. Muchas vidas humanas se perdieron por los actos de una loba.—Una loba no nos define a todos —replica otro de
CAPÍTULO 104: LA REDENCIÓN DE UN BETAGaiaSabía que en cuanto Bastian se diera cuenta de lo que ocurría, las consecuencias para Darryl serían mucho más desalentadoras de lo que imaginábamos. Apenas él reveló la verdad, Bastian convocó una nueva reunión con los Alfas, y ahora estamos aquí, poco antes de un nuevo anochecer, sin poder partir a Miridian, porque primero debemos resolver esto.Las voces en la sala de consejo son como un rugido lejano en mis oídos mientras observo a Darryl, arrodillado en el centro del círculo formado por los Alfas. Su figura, abatida y resignada, me llena de una tristeza profunda. Bastian está de pie, con el rostro endurecido y la furia chispeando en sus ojos. Es obvio que quiere descargar la frustración de haber perdido, con alguien más.—¡Este traidor no merece piedad! —exclama Bastian, su voz hace un eco en la sala—. ¡Debe pagar con su vida por lo que hizo!Los murmullos de los Alfas aumentan en volumen, algunos asintiendo en acuerdo mientras otros está
CAPÍTULO 105: EL PRIMER ENCUENTRO CON EL REYGaiaEl viento azota con fuerza mientras el carruaje se abre paso por el camino hacia Miridian. Mi mente está en constante movimiento, recordando cada detalle de mi infancia en este lugar. Junto a mí, Draven y Nikolai permanecen en silencio con expresiones tensas y alertas. La incertidumbre del encuentro que nos espera pesa sobre nosotros como una niebla densa.—Estamos cerca —dice Draven, mirando por la ventana.Asiento, intentando mantener la calma. La fortaleza de Miridian se alza en el horizonte, imponente y sombría. Este lugar guarda tantos recuerdos, la mayoría dolorosos, pero tengo que ser fuerte. Por todos nosotros.Al llegar, la hostilidad de los humanos se hace presente. Un grupo de al menos diez hombres armados hasta los dientes nos detiene en la entrada.—¡Ja! Ilusos, ¿qué acaso no saben que podríamos destrozarlos en un segundo? —murmura Nikolai.—¡Shh! —lo silencio—, nosotros lo sabemos, pero no podemos empezar con esa frase si
CAPÍTULO 106: NEGOCIACIONESGaiaMis pasos resuenan en los pasillos de piedra, recordándome cada momento vivido en este castillo. Estar aquí trae de nuevo a mi mente la muerte de mi madre. Realmente todo aquello se siente como si hubiese pasado hace muchísimos años. Toda una vida que dejé atrás. Sé que mi madre estaría orgullosa de ver en quién me he convertido ahora, solo espero no decepcionarla y conseguir que humanos y lobos puedan coexistir en paz.A mi lado, Draven y Nikolai se mantienen alerta, listos para cualquier eventualidad. Hemos esperado casi todo un día completo mientras él delibera con el consejo sobre qué hacer, pero ya no puedo esperar más. Hoy enfrentaremos al rey Emyr con una propuesta que podría cambiarlo todo.Cuando llegamos, Emyr ya está esperándonos. Su mirada es dura, pero hay una chispa de curiosidad en sus ojos. Sabe que no hemos venido aquí para perder el tiempo.—Gaia, tus palabras de ayer me dejaron mucho en qué pensar —dice el rey, su voz grave resuena e
CAPÍTULO 107: DELIBERACIONESEn la sala de deliberaciones del castillo de Miridian, los consejeros del rey Emyr se reúnen en un círculo cerrado. La noticia de la posible alianza con los licántropos ha sembrado discordia entre ellos. Algunos ven en la propuesta de Gaia como una oportunidad para la paz, pero otros, profundamente desconfiados de los lobos, consideran la idea una traición a su gente.—No podemos permitir que Emyr se doblegue ante esos monstruos —dice Lord Cedric con una voz cargada de veneno—. Nos destruirán desde adentro.—La propuesta de Gaia tiene mérito —responde Lady Isabel, tratando de mantener la calma—. La guerra solo nos traerá más pérdidas.Cedric se inclina hacia adelante, sus ojos brillan con una intensidad peligrosa.—La guerra nos traerá honor y victoria. Pero si dejamos que esos licántropos se acerquen a nuestras puertas, estaremos firmando nuestra sentencia de muerte.Otros consejeros murmuran su acuerdo. La atmósfera se vuelve cada vez más tensa. Los cons