Cuando dice eso mi mirada va hacia la puerta instintivamente al pensar que tal vez hay alguien escuchando toda nuestra conversación, como por arte de magia entra la doctora unos segundos después y nos mira a ambos confundida por la razón que la miramos así.
- ¿Esperaban a alguien?-cuestiona señalando la puerta detrás de ella.
-¿Desde hace cuánto está usted allí?- pregunta él desconfiado.
-Hace un momento, su amigo estuvo afuera, pero apenas me acerqué el simplemente se fue, ¿Pasó algo malo?- interroga mirándolo de reojo.
-¿Amigo?- cuestiona muy confundido y camina hacia la puerta, la abre y mira a ambos lados tratando de encontrar a esa persona que dijo ser nuestro amigo y que ha escuchado la mayor parte de nuestra discusión -¿Lo vio? ¿Cómo era? - pregunta entrando alterado al no hallar a nadie.
- Tenía cubierta la mitad de la cara como usted - dice señalando su cubre bocas.
-¿C
Despierto exaltada y miro a todos lados con miedo, el recuerdo de lo que acabo de recordar entre sueños hace que mi corazón se estruje y mi vista pase a mi estómago.Estoy en bata de hospital, pero por alguna razón me siento diferente.¿Paso algo mientras dormía?, esa pregunta ronda mi cabeza poniéndome nerviosa sin dejarme tranquila ni un segundo.Me levanto y presiono el botón a un costado que llama a alguna enfermera, una entra y me mira seria.-Ya despertó la bella durmiente-dice en un español bastante raro que apenas logró entender - ¿Deseas algo?-pregunta mirándome.-Yo... mi bebé... -susurro temerosa.Su cara cambia drásticamente al ver una carpeta al frente de mi cama y me mira arrepentida. Esa mirada es la que más detesto de todas.-¿Me puede decir que está ocurriendo?- pregunto m&aac
DAIANA JONES:El doctor me mira una última y sin decir nada más se va dejándome solo con él.No puedo verlo, pero el escuchar a esa máquina por alguna razón me tranquiliza. No sé si me alegra el hecho que esté vivo para que sufra en vida o simplemente me preocupé por él.Esa interrogante me causa escalofríos y me acuesto de nuevo esta vez dándole la espalda para no pensar más en el tema.Trato de cerrar los ojos para dormir, pero las palabras que ha dicho el doctor me ha dejado sin respuesta. Si hubiera sido más fuerte y no me hubiera dormido, tal vez podía haber salvado a mi hijo. ¿Podría haberlo hecho?Esa interrogante me hace doler la cabeza sin poder saber en realidad lo que en verdad pienso de todo esto.Volteo mi cuerpo y mi m
EZRA ANGHELLa idea de separarme de ella es algo que aún no puedo asimilar del todo. Entiendo que quiere espacio con la muerte de nuestro hijo, pero ¿No se da cuenta que esto también me duele a mí?.No entiendo porque ella es tan egoísta en pensar solo en su dolor y no en el de la otra persona.¿Cree que me gusta la idea de que mi primer hijo ya no exista?Miro cada tanto a su cama para ver de nuevo su silueta sabiendo que en cualquier momento ya no estará en ese lugar.Aunque lo intente, sé que será en vano si ella ya decidió irse, no puedo hacerla cambiar de opinión y tampoco quiero obligarla a estar en un lugar donde se pondrá complicada la cosa por la muerte de mi primogénito. Todos querrán tener la oportunidad de vencerme ahora que se sabe la noticia.Quisiera que ella esté aquí para que me dé la energía
DAIANA JONESMiro por última vez en su dirección, parece dormir así que decido no acercarme ni dar un paso hacia adelante. Él dijo que no quería despedidas y eso haré.Camino fuera de la habitación y entro al elevador, el pasillo hacia el cuarto donde está él, parece solitario espero que tenga una recuperación buena y que su familia en vez de juzgarlo trate de cuidar de su salud al menos por esta vez.Una sonrisa amarga me sale al recordar la clase de persona que es su padre y que de por si no se va a preocupar por él en absoluto. Al pasar unos minutos las puertas se vuelven a abrir y puedo divisar que a unos metros esta la persona en quien acabo de pensar. Al parecer mi mala suerte volvió, el padre de él camina con autoridad, en su compañía hay dos hombres que parecen venir de una película de acción, camino rápido hacia una columna que impide que él me vea, por ninguna razón pienso permitir que él me retenga. Camino paso
EZRA ANGHELEs poco describir con una palabra lo que siento ahora que no la tengo a mi lado, en poco tiempo ella ha logrado lo que cualquier mujer no hace. Las veces en las que parece que la veo me está volviendo loco.De solo pensar en lo que pudo ser si ese accidente no hubiera ocurrido me hace más miserable.Quisiera tanto volver a verla, han pasado apenas dos semanas desde que con voz dura le dijera que no quería despedidas. Me arrepiento tanto no haberla abrazado aunque sea una vez más.¿Estará bien?¿Habrá vuelto a su casa como ella siempre dijo querer?Mi corazón duele al pensar en ella y cada vez que mi mente juega conmigo me hace imaginarla frente mío. Así como en este preciso momento, puedo apostar que ella está aquí frente mío sentada en un mueble de mi oficina mientras lee una revista.- Demonios, al menos dé
DAIANA JONESHan pasado exactamente trece días desde que no he vuelto a ver ni tampoco he vuelto a saber de Ezra.Siendo él alguien importante supuse que escucharía mucho su nombre por estos lugares, pero parece ser un completo desconocido para algunas personas de las que viven aquí.Estoy tan cerca de él en estos momentos por un pedido, estoy convencida que seguramente ahora está tras su escritorio haciendo papeleo y más papeleo.Me quedo parada mirando hacia su mansión por largos minutos hasta que puedo observar como una pareja sale del lugar. Mi corazón empieza a latir apresurado de pensar que él ya está con alguien más, pero todos esos pensamientos fueron borrados al destacar la figura que he visto por años y que me sé de memoria.Es Kathie, estoy convencida que es ella por su forma de caminar, el color de su cabello sigue siendo igual a como l
EZRA ANGHELParece que mi mente está jugando de nuevo conmigo al hacerme verla, trato de limpiar mis ojos ante la incómoda broma de mi vista, pero aunque baje la mirada y la suba de nuevo, sigo viéndola.- Demonios, dame un descanso - digo enojado conmigo mismo por las tantas veces que mi mente ha jugado conmigo poniendo su rostro en las personas o imaginando que está siempre frente a mi.Escucho sus pasos alejarse y sin pensarlo la miro de nuevo mientras camina, me levanto de mi sitio rápidamente y cuando estoy a dos pasos de ella agarro su mano para voltear su cuerpo. Ella da media vuelta y me mira, no puedo ocultar la sorpresa y alegría que me causa encontrarla aquí justo ahora.En realidad hasta hace poco pensé que ella se iría del país apenas tuvo la oportunidad.-¿Daiana?- cuestiono como si no pudiera creer todavía que ella esté frente mío.
DAIANA JONESSé más que nadie que fui inmadura al solo irme sin decir mejor mi forma de pensar.Nunca pensé en encontrarme con ellos aquí, me disgusta mucho que Luci quiera hacer algo que después se arrepentirá.No me imaginé que me respondiera de esa manera, pero lo hizo. Al parecer el amor de un hombre puede más que la amistad de años o tal vez no éramos tan amigas como pensábamos.Decido dejar de hacer que ellos me hagan enojar en un día así, me escabulló por la puerta trasera del restaurante y apenas abro la puerta el buen clima me da la bienvenida haciendo que sonría. Esta un poco nublado, pero el calor es perfecto junto con el viento. Parece que pronto va a anochecer.- Sabia que estarías aquí- dice alguien a mi costado, volteo mi cabeza esperando que no sea quien creo que es, pero al parecer hoy es el día elegido para ser mi mala suerte.-No acabamos de vernos, ¿Por qué no solo te vas y vuelves a esa mansión?- pregunto sin remordimi