PDV Esperanza

Cuando yo y el resto de mis hermanos y hermanas, escuchamos las palabras de nuestro padre, todos nosotros terminamos por mirarnos involuntariamente entre nosotros, claramente estábamos sorprendidos por lo que nuestro padre nos había dicho de forma tan firme.

Nuestro padre siempre había sido alguien un poco distante, frio y muy serio, a veces incluso demasiado, nunca lo habíamos visto expresar muchas emociones fuerte a lo largo de su vida, de hecho yo en particular no lo había visto más que con su expresión seria e imperturbable.

Debido a ese comportamiento que tenía para con nosotros, todos nosotros, tanto mis hermanos como mis hermanas, habíamos pensado que nuestro padre era una persona que estaba libre de casi cualquier emoción o sentimentalismo alguno, esa era la imagen que teníamos de él, la de un hombre poderoso e imperturbable.

Esa imagen que nosotros teníamos de él, había facilitado mucho el hecho de que lo viéramos como una figura de autoridad absol