PDV Jacob
—Yo… está bien —le dijo Henry a Rebeca mientras murmuraba.— ¿Entonces vas a cumplir con tú parte de la apuesta? —le pregunto Rebeca a Henry mientras lo miraba.—Cumpliré, lo cumpliré, pero por favor no le muestres ese video al señor Roberto —le dijo Henry mientras miraba a Rebeca con ojos llenos de lastima.Obviamente quería darle lastima a Rebeca y lograr que esta se apiadara de èl, el hecho de que cumpliera con su parte de la apuesta no garantizaba que Rebeca no le mostrara el video al señor Roberto, por lo que quería darle lastima a Rebeca con el fin de poder asegurarse de que no llegara a hacer algo a escondidas suyas.Henry había perdido cualquier beligerancia o agresividad que hubiese podido tener al principio de nuestra disputa, y ahora solo quedaba alguien manso que estaba a merced de Rebeca.El cambio que se había producido era impactante por decir lo menos, era impresionante como Rebeca había logrado encontrar la forma de doblegar a Henry sin nPDV Jacob— ¿Te disculpas por qué razón…? —le pregunto Rebeca a Henry mientras lo miraba a los ojos.Cuando Henry escucho a Rebeca decir estas palabras, nuevamente mostro una expresión abatida, pero no se atrevió a contradecir a Rebeca en esta ocasión.—Yo, lo siento, lo siento por haberlos provocado en la entrada, lo siento por haberlos llamado pueblerinos, lo siento por haberlos insultado, lo siento por todo, por todo lo que les eh llegado a hacer —nos dijo Henry a todos nosotros, mientras nos miraba a los ojos.Cielos, al final de verdad lo hizo, necesito mucha persuasión y amenazas por parte de Rebeca para poder lograr que finalmente se arrodillara y nos pidiera disculpas, pero al final habíamos logrado que pidiera disculpas y se arrodillara ante nosotros.No fue fácil, pero habíamos logrado enseñarle a este niño rico… quien estaba al mando aquí, y también le habíamos enseñado una lección de humildad al mismo tiempo, una especie de beneficio doble por así decirlo.
PDV Jacob— ¿Te disculpas por qué razón…? —le pregunto Rebeca a Henry mientras lo miraba a los ojos.Cuando Henry escucho a Rebeca decir estas palabras, nuevamente mostro una expresión abatida, pero no se atrevió a contradecir a Rebeca en esta ocasión.—Yo, lo siento, lo siento por haberlos provocado en la entrada, lo siento por haberlos llamado pueblerinos, lo siento por haberlos insultado, lo siento por todo, por todo lo que les eh llegado a hacer —nos dijo Henry a todos nosotros, mientras nos miraba a los ojos.Cielos, al final de verdad lo hizo, necesito mucha persuasión y amenazas por parte de Rebeca para poder lograr que finalmente se arrodillara y nos pidiera disculpas, pero al final habíamos logrado que pidiera disculpas y se arrodillara ante nosotros.No fue fácil, pero habíamos logrado enseñarle a este niño rico… quien estaba al mando aquí, y también le habíamos enseñado una lección de humildad al mismo tiempo, una especie de beneficio doble por así decirlo.
PDV HenryNo podía creerlo, simplemente no podía creerlo, cuanta humillación, nunca antes en toda mi vida me había sentido tan humillado.Yo era Henry Smith, era el heredero de mi padre, su único heredero varón, era el heredero de una gran empresa que estaba en auge, había disfrutado de una gran vida hasta ahora, llena de privilegios y todo tipo de beneficios.Yo era parte de esa pequeña elite de personas que estaban destinadas a estar por encima de las demás, yo era alguien único.Nunca había sido humilde ¿Para qué serlo? Si con la humildad no te ganabas nada, y además yo tenía todo lo que era necesario para no ser humilde y ser lo opuesto, por esas razones era alguien orgulloso y tenía muchas razones para serlo.Yo era muy bien parecido, cada vez que caminaba por la calle al menos 5 de cada 10 mujeres se girarían para verme mientras que en otras ocasiones ese número incluso aumentaba aún más, además de mi belleza, era alguien rico, muy rico, y también tenía un gran
PDV HenryNo pude creer que un pueblerino como ese sujeto se interponía en mi camino e incluso se atrevía a enfrentarme, a mí, de entre todas las personas, no podía tolerar eso, era humillante, y lo que no podía tolerar aún más fue el hecho de que Selena no solo se resistía mis encantos sino que demás prefería colocarse detrás de ese don nadie pueblerino cuyo nombre ni siquiera conocía.Cuanta humillación, debía mostrarle a esa Selena quien mandaba entre nosotros 2, y por fortuna para mí, surgió una oportunidad de hacerlo, ya que ese tonto pueblerino se atrevió a apostar conmigo en una apuesta de quien tenía más dinero.¿Cómo podía ser tan tonto? Se estaba atreviendo a apostar conmigo, el heredero de la familia Smith, siendo él un simple pueblerino sin nombre que nadie conocía.El que él se atreviera a apostar conmigo era un insulto, pero decidí aprovechar la ocasión para poder hacer mías a esas 2 mujeres, siendo a ellas 2 las que obtendría al ganar la apuesta que
PDV JacobSelena me estaba mirando en estos momentos con su expresión tímida y con el rubor rojo en sus mejillas, se veía muy encantadora en estos momentos, realmente encantadora, el sentimiento que sentía debajo de mi cintura se volvía más fuerte, y al final para poder controlarme aparte la mirada de su cara y en su lugar fije mi mirada en Rebeca, la cual había salido junto con Selena.— ¿Y bien? ¿Qué te parece? ¿Se ve lo suficientemente bonita? —me pregunto Rebeca, mientras nos miraba a mí y a Carla.Quería la opinión de ambos para poder juzgar si Selena se veía lo suficientemente bonita en estos momentos, mientras más puntos de vista tuviéramos, mejor sería para nosotros.— ¡Claro! La señorita se ve muy hermosa, con usted luciéndose así, de seguro será el centro de atención a donde quiera que vaya —le dijo Clara a Rebeca, en respuesta a su pregunta.—Bien, yo también considero esto así, pero Jacob ¿Qué piensas tú? ¿A Selena le queda bien ese vestido? ¿Es lo s
PDV Jacob— ¿Puedes llevarnos a donde se encuentran los trajes para hombres? —le pregunto Rebeca a Carla, mientras la miraba a los ojos con su expresión indiferente.—Bien, síganme, no estamos muy lejos de donde se encuentran los trajes —nos dijo Carla, antes de girarse y empezar a caminar, siendo seguida por todos nosotros.Selena se llevó el traje purpura de 100.000 dólares en sus manos mientras caminaba con una sonrisa todo el camino hacia la sección de trajes para hombres, verla así de feliz me daba sentimientos complicados.El impacto que había sentido al verla en estos trajes de gala seguía muy fresco en mí, y todavía no podía evitar sentirme raro cuando estaba junto con Selena.Selena había regresado a su ropa normal, y por suerte su apariencia actual no era tan llamativa como antes lo cual lograba que pudiera mantenerme más o menos imperturbable a su lado pero aun así seguía sintiéndome extraño.Anteriormente había sentido toda una serie de sentimientos que
PDV SelenaMi mundo se había volteado de cabeza cuando repentinamente Jacob se había convertido en mi jefe, y había adquirido esa actitud tan dominante para conmigo, el cambio fue muy brusco, y no ayudo mucho el hecho de que vinieran por mí y sin avisar a la empresa en al cual trabajaba para poder llevarme a quien sabe qué lugar.Cuando me entere de que me llevarían al baile de la familia Saint, el cual era uno de los eventos más prestigiosos del mundo, no pude evitar alegrarme mucho, aunque al mismo tiempo quede muy sorprendida de que sería la pareja de Jacob.Mis sentimientos por Jacob el de hoy estaban hechos un desastre, todos los cambios que habían sucedido habían sido demasiado rápidos para poder asimilarlos de forma correcta, hace solo el día de ayer Jacob seguía siendo mi empelado sumiso, pero ahora era mi jefe, y la forma en cual se comportaba conmigo era como si yo fuera de su propiedad.Fue un cambio muy grande, y aun no había podido aceptarlos del todo y toda
PVD Jacob— ¿Cómo es tú casa Rebeca? —le pregunte a Rebeca, mientras la miraba a los ojos con curiosidad.—Lo sabrás en cuanto lleguemos Jacob —me dijo Rebeca, mientras miraba por la ventana de la limusina.—Vamos ¿No puedes decirme al menos algo? —le pregunte a Rebeca mientras la miraba con ojos de gato, o al menos algo parecido a eso, como era hombre hacer ese tipo de ojos no se me daba nada bien en realidad, ciertamente mis ojos de gato no se podían comprar ni de cerca con los ojos de gato de Esperanza.— ¿Para qué molestarme en explicarte si de todas formas podrás verla en cuanto lleguemos? —me pregunto Rebeca mientras me miraba a los ojos y suspiraba.—Tengo curiosidad nada mas —le dije a Rebeca, siendo honestos con mis palabras.—Bien, bien, te lo diré —me dijo Rebeca mientras volvía a suspiraba y me miraba fijamente a los ojos.—Excelente —le dije a Rebeca con algo de entusiasmo en mi voz.—Mi casa no es la gran cosa en realidad, solo es una casa con u