“¿Cómo crees que ayudarían? ¿Esperas que la familia Xiao vaya contra Yi Jinli y se convierta en su enemiga? ¿O esperas que la familia Xiao inyecte miles de millones para subir nuestras acciones?". Preguntó Hao Qirong.

Lyu Zhixue inmediatamente cerró la boca. Ella entendía poco sobre el mundo empresarial. Una vez que su esposo lo dijo, entendió que era imposible obtener ayuda de la familia Xiao.

No se trataba solo de si la familia Xiao podía sacar unos pocos miles de millones de una sola vez. El solo hecho de que irían en contra de Yi Jinli para ellos era imposible hacer algo.

"Entonces... Entonces, ¿qué debemos hacer?". Lyu Zhixue estaba ansiosa. "¿Qué le pasa a Yi Jinli que ahora está hechizado por una mujer como Ling Yiran? ¿Qué drogas le dio esa mujer? ¡Es solo una mujer que Ziqi no quiso!".

Hao Qirong reprendió con impaciencia: “¡Suficiente! Puedes decir esas cosas delante de mí, pero no andes hablando de ello en público, no sea que quieras atraer más problemas innecesarios”.