Ella había agotado su amor por él durante esos días oscuros...

Xia Xi abrió lentamente los ojos, solo para descubrir que ya estaba amaneciendo. La enfermera la miraba con preocupación. "Señorita Xia, está despierta. ¿Quiere que la ayude a ir al baño a bañarse?".

"Sí, gracias", dijo Xia Xi. Se sentó, solo para sentir lágrimas en sus ojos.

Fue porque había soñado con lo que sucedió ese año, y era demasiado doloroso...

Xia Xi fue al baño. Después de bañarse, la enfermera vino a cambiar el vendaje de sus heridas. Una vez hecho esto, ella desayunó.

Todo era diferente de cuando estaba encerrada en el hospital psiquiátrico.

Estaba a la mitad de su desayuno cuando de repente escuchó una discusión fuera de la sala, seguida de lo que parecían ser sonidos de pelea.

Xia Xi frunció el ceño, preguntándose qué estaba pasando afuera. De repente, la puerta de la sala se abrió y alguien entró. La enfermera de la sala trató de detener a la persona, pero alguien la inmovilizó al momento siguiente.