"Sí, espero hablar más contigo". Ling Yiran le sonrió a Zhang Yaer.

"Está bien, haremos una cita en algún momento". Con eso, Zhang Yaer se despidió de ellos y se fue en un coche mientras sostenía la mano de su esposo.

Ling Yiran vio el coche alejarse y le dijo a Gu Lichen: "Gracias. Me hiciste otro favor".

"Yiran, siempre te ayudaré si puedo", dijo Gu Lichen.

"¿Cuál es... el punto…?", dijo Ling Yiran con un suspiro. Solo se sentía indescriptiblemente estresada cuando él se comportaba así.

"Tal vez... está destinado a ser así". Él mostró una sonrisa amarga.

Ling Yiran miró a la persona frente a ella. "Lichen, si las cosas están destinadas a ser así, la que está destinada a estar contigo todavía debe estar esperándote".

'¿Alguien está... esperándome?'.

Gu Lichen observó a Ling Yiran entrar en el coche, el cual desapareció lentamente de su vista. Ella siguió moviéndose mientras él permanecía en el mismo lugar.

Él había permanecido en ese bosque en la colina cuando la conoció por